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España: Último intento

En la última  oportunidad para formar gobierno, el rey de España convocó a los representantes de los partidos políticos en el Congreso para tratar de llegar a un acuerdo que evite la convocatoria a nuevas elecciones.

En cumplimiento al artículo 99 de la Constitución Española, el Rey Felipe VI se reunirá con los líderes parlamentarios, y verificará si existen o no las condiciones para intentar la investidura de un presidente.

En España, a diferencia de otras democracias, el presidente no es elegido por votación directa de la población, sino por el Congreso de Diputados, quienes sí fueron elegidos en los comicios del pasado diciembre

En la última  oportunidad para formar gobierno, el rey de España convocó a los representantes de los partidos políticos en el Congreso para tratar de llegar a un acuerdo que evite la convocatoria a nuevas elecciones.

En cumplimiento al artículo 99 de la Constitución Española, el Rey Felipe VI se reunirá con los líderes parlamentarios, y verificará si existen o no las condiciones para intentar la investidura de un presidente.

El Rey sostendrá una primera reunión previa con el presidente de la Cámara de Diputados, Patxi López, quien le entregará la lista de los representantes interesados en el encuentro.

Posteriormente, las reuniones se realizarán los días 25 y 26 de abril, y el orden de las mismas será de menor a mayor representación parlamentaria. Serían 14 las reuniones que sostendría el Rey, teniendo en cuenta que el partido Esquerra Republicana de Catalunya no participará en las reuniones.

Tras dos intentos de investidura después de las elecciones del 20 de diciembre, que resultaron un fracaso, este diálogo entre el Rey y los partidos es la última esperanza para el sistema político español, ya que en caso de no haber acuerdo, la actual legislatura se disolvería y se deberá convocar a nuevas elecciones.

En España, a diferencia de otras democracias, el presidente no es elegido por votación directa de la población, sino por el Congreso de Diputados, quienes sí fueron elegidos en los comicios del pasado diciembre.

Y aunque el Partido Popular del presidente Mariano Rajoy ganó las elecciones, no obtuvo una mayoría que le permitiera investir a su mandatario.

En un primer intento de investidura, en enero de este año el Rey designó a Mariano Rajoy la tarea de acudir al pleno del Congreso para formar gobierno, pero, al no contar con los votos necesarios, Rajoy declinó la propuesta.

Por otra parte el PSOE, de izquierda, y el recién formado Podemos, de izquierda socialista, quedaron en segundo y tercer lugar de las votaciones, lo que los colocaba en posición de formar una gran alianza para el gobierno.

Sin embargo, aunque hubo acercamientos entre los dirigentes de ambos partidos, considerando la posibilidad de investir a Pedro Sánchez del PSOE como presidente, dicha alianza jamás se materializó.

Los dirigentes del PSOE le tendieron la mano a Ciudadanos, partido de derecha, y se rompieron las negociaciones con Podemos. Aún así, dicha coalición no contaba con los votos suficientes para designar a Sánchez sin el apoyo de Podemos.

Entre acusaciones y pactos

En febrero, el Rey Felipe VI propuso a Pedro Sánchez para formar gobierno, y el líder del PSOE acudiría al pleno con la esperanza de contar con los suficientes votos en el último momento, o que al final, los diputados de Podemos se abstuvieran de votar y con eso alcanzar el porcentaje necesario, sin embargo, tampoco logró la investidura.

Desde entonces, el tiempo ha transcurrido entre acusaciones de los dirigentes del PSOE, Ciudadanos y Podemos, así como intentos estériles de alcanzar un pacto de gobierno.

Los dirigentes del PSOE y de Ciudadanos han acusado a Pablo Iglesias de bloquear la formación de un gobierno de amplia alianza.

Podemos se ha negado a formar una coalición con PSOE mientras éste siga su alianza con Ciudadanos, y pide que, además de tomar sus propuestas para gobierno, el PSOE rompa definitivamente con Ciudadanos.

Este último intento para la formación de gobierno parece una mera formalidad, pues ya los propios partidos políticos están tomando posiciones para la elección, formando o fortaleciendo alianzas, descalificando a sus adversarios, en precampaña política.

La fecha límite para la formación de gobierno es el próximo 2 de mayo, dos meses después del intento fallido de investidura por parte de Pedro Sánchez.

De no haber acuerdo antes de esta fecha, el Rey Felipe VI firmaría la disolución de las dos cámaras de representantes y la convocatoria de nuevas elecciones, que serían realizadas el mes de junio.

Las posturas

Mientras tanto, las principales fuerzas y actores políticos ya se preparan ante las inminentes elecciones.

>Mariano Rajoy

Trata de mantenerse al margen de la polémica del proceso postelectoral, y sabe que su partido podría ser el principal beneficiado de la agitación política de los últimos meses.

>Pedro Sánchez

Ve como sus aspiraciones a ser investido presidente van menguando; su acercamiento con

Ciudadanos le ha costado el apoyo de Podemos y sabe que se está quedando solo.

>Podemos

Para el partido, la incógnita es si lograrán superar la votación obtenida en 2015, cuando se convirtieron en la tercera fuerza política, rompiendo el bipartidismo en España.

 

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