La legisladora brasileña Ana Paula da Silva causó un escándalo al presentarse a la ceremonia de juramentación en la legislatura del estado de Santa Catarina con un vestido rojo escotado.
Su vestimenta en la ceremonia del 1 de febrero provocó una tormenta en las redes sociales.
Sus detractores, entre ellos muchas mujeres, sostuvieron que su vestimenta fue “inapropiada”, “escandalosa” y “vulgar”.
Otros aseguraron que la vestimenta no tiene importancia y que los políticos deben concentrarse en asuntos más importantes.
Da Silva se defendió a través de Facebook.
“El mundo macho y prejuicioso en el que vive usted no es el mío”, escribió en respuesta a un hombre que preguntó cómo su escote ayudaba a la democracia. “He visto a muchos hombres de saco y corbata tomar dinero del sector de salud, de las comidas escolares, eso es inaceptable”.
Mientras algunos preguntaban si la diputada había violado alguna norma, sus defensores trataron de orientar el debate hacia sus resultados electorales y actividad política.
Da Silva estuvo entre los cinco candidatos más votados en la elección legislativa estatal del año pasado y anteriormente fue alcaldesa de la localidad de Bombinhas durante dos períodos.
La madre de dos hijos dijo que vestirá como le parezca y anunció con demandar a quienes enviaron los mensajes más agresivos.
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