En Argentina la pobreza avanza con las políticas de Milei

El presidente de Argentina, Javier Milei, llegó a la Casa Rosada con la promesa de revertir las prácticas que habían sumido a su país en una espiral de deuda y pobreza; sin embargo, a meses de haber asumido la presidencia, las recetas empleadas por el mandatario parecen no cumplir con lo esperado.

En papel, las políticas económicas impulsadas por Milei pretendían revolucionar la vida pública argentina, lo que lo llevó a ganar las elecciones; sin embargo, previo a que tomara posesión el 10 de diciembre pasado, ya se hacían presentes voces que advertían que su programa económico repetiría los caminos neoliberales que habían llevado a Argentina a su situación actual.

En Copiar y Pegar, el plan económico de Milei, artículo publicado por el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), el economista argentino Guillermo Oglietti analizó las 64 propuestas económicas del plan de Milei y encontró que, en realidad, la mayoría de ellas se apegaba a un modelo neoliberal que legaba un bajo crecimiento económico, en el caso de Macri negativo, y fuertes presiones sociales para quienes usan los servicios del Estado.

Una vez en el poder, y con el libertarismo como bandera, en diciembre Milei devaluó el peso argentino y comenzó la renegociación de la deuda argentina con el Fondo Monetario Internacional, el cual vio las medidas tomadas por el gobierno como acciones necesarias para mejorar las finanzas públicas, estabilizar el régimen cambiario y con ello proteger a los más vulnerables de la sociedad.

Un cálculo de pobreza poco halagador para la administración de Milei

En sentido contrario, hoy la pobreza en el país sudamericano llega a los niveles más altos de los últimos 20 años; así lo reporta la Pontificia Universidad Católica Argentina (UCA), cuyo Observatorio de Deuda Social calcula que la pobreza en el país sudamericano alcanzó el 57.4 por ciento en enero, lo que representa un aumento del ocho por ciento respecto a diciembre y un 13 por ciento total si se compara con el tercer trimestre del año pasado.

De acuerdo al reporte de la UCA, los motivos del aumento de la pobreza pasan no solo por la devaluación del peso argentino, sino también por la alza en los precios de la canasta básica y la caída del ingreso en los hogares, lo que se traduce en 27 millones de argentinos en esta condición.

Las personas más afectadas por este aumento son quienes no son beneficiadas por programas gubernamentales; sin embargo, la ayuda estatal no garantiza una mejor calidad de vida, pues entre la población que recibe apoyo gubernamental la pobreza también aumentó del 81.9 por ciento a finales de 2023 a 85.5 por ciento en enero pasado.

En cuestión de meses aumenta la indigencia en Argentina

De acuerdo al mismo estudio de la UCA, la indigencia en el país también aumentó ligeramente en comparación con diciembre del año pasado, pero dio un salto si se contrasta con el tercer trimestre de 2023 cuando las personas sin hogar eran apenas el 9.6 por ciento de la población, mientras que en enero de este año alcanzaron el 15 por ciento.

En respuesta a lo difundido por el Observatorio de Deuda Social, Javier Milei evadió la responsabilidad que el reporte finca en sus políticas y culpó a la casta, como el presidente denomina a los políticos tradicionales, cuya “herencia” es la ruina de una Argentina donde seis de cada 10 ciudadanos está en condiciones de pobreza.

En un mensaje en su cuenta personal de X, Milei se posicionó en contra de la clase política y se comprometió a llevar a cabo el modelo por el que fue electo. “La destrucción de los últimos 100 años no tiene parangón en Occidente. Los políticos tienen que entender que la gente votó por un cambio y que nosotros vamos a dar la vida para llevarlo adelante. No vinimos a jugar al juego mediocre de la política. Vinimos a cambiar al país”, escribió.

Milei es una respuesta económica doctrinaria

Para el maestro Raúl Ignacio Morales Chávez, internacionalista y profesor de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el gobierno de Javier Milei sigue una doctrina neoliberal en un contexto internacional que ha superado este paradigma.

“Milei lo único que buscó establecer fue una estrategia basada en el neoliberalismo en contra de las medidas desarrollistas que se estaban implementando en Argentina, políticas basadas en apoyos, subsidios y ampliación del gasto público hacia la población (…) Milei está contrayendo terriblemente el gasto público y está buscando aumentar los ingresos para lograr el equilibrio fiscal, pero esto implica disminuir programas sociales que amortiguaban la pobreza”, anota el académico.

Para Morales Chávez, las medidas implementadas por Milei no son una respuesta a corto plazo para las necesidades de la población, al contrario, en este periodo la calidad de vida ha disminuido para muchos argentinos. Las políticas del presidente buscan generar una transformación a mediano y largo plazo; sin embargo, no parece tener la capacidad de lograrlo.

“Estas medidas no son expeditas, van a tener una incidencia en mediano plazo y tendríamos que analizar a muy largo plazo si se logran establecer. El problema principal para Milei es el contexto que está viviendo, si estas medidas las hubiera tomado en los 90 sería diferente, pero ahorita es muy complicado.

“En primer lugar, porque ni él ni su partido tienen el suficiente poder para llevar a cabo las reformas que está proponiendo (…) Va ser muy difícil que sus políticas se lleguen a implementar; y en segundo, sus medidas son muy antipopulares en la población, pues la gente se dio cuenta que lo que él establece va en contra de lo que se tenía antes, como apoyos que están desapareciendo”, comenta Morales Chávez.

Para el catedrático, el contexto internacional va en contra de las medidas de liberalización propuestas por Milei, debido a que la mayoría de los países están apostando por un crecimiento interno sin el cual Argentina se encuentra frente a un panorama de depredación en el que su campo y su industria quedarán desamparados ante fuerzas de mercado contra las cuales no podrán competir.