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"Última oportunidad para la coalición que gobierna Europa para entender que o hay un gran pacto para que Europa funcione y crezca o el proyecto europeo está en serio riesgo"
Así como ocurrió hace más de 2 mil años, el pensamiento de Grecia está influenciando al resto de Europa.
Después de que el partido de ultraizquierda Syriza arrasó este domingo en las elecciones y que Alexis Tsipras se volvió ayer el primer ministro griego, países como España, Francia, Alemania y Reino Unido sufrirían las réplicas de este sismo político.
Syriza, que controlará 162 de los 300 escaños del parlamento por una coalición con el partido Griegos Independientes, llegó al poder gracias a sus propuestas en contra de las políticas de austeridad y excesivo control de la Unión Europea (UE).
A la UE le preocupa que la victoria de Syriza impulse el triunfo del Frente Nacional (FN) en Francia, del Partido por la Independencia de Reino Unido (UKIP), de Podemos en España y de la Alternativa por Alemania.
Estos partidos, ya sean de derecha o de izquierda, coinciden con el grupo de Alexis Tsipras en que la UE ejerce demasiado control sobre los países miembros, por lo que proponen mayor soberanía y hasta abandonar el euro o salirse de la Unión.
El ejemplo de Grecia
“(Syriza) ha galvanizado la sensación de ira y alienación que han albergado muchos griegos contra las políticas de austeridad del gobierno y contra la troika, el cuerpo que renegoció la deuda que carga el país y que se rige por la Comisión Europea, el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional (FMI)”, informó ayer BBC Mundo.
Grecia tiene una deuda externa de cerca de 278 mil millones de dólares, lo que representa el 175 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB).
Durante la campaña de Tsipras, circuló el rumor que Syriza podría salirse de la eurozona para reestructurar la política y economía del país, algo que ha inquietado a políticos como la lideresa moral de la UE, la canciller alemana Angela Merkel.
Tsipras ha insistido en que desea mantener el euro en Grecia, pero analistas perciben que si el nuevo primer ministro no consigue renegociar la deuda en Bruselas podría tomar medidas drásticas.
“Es posible que Tsipras se frustre rápidamente y se mueva para cortar lazos con Bruselas”, publicó ayer The Guardian, “aunque el primer paso sería dejar el euro.
“El problema es que las encuestas de opinión dicen que más de tres cuartos de los griegos quieren permanecer en la UE. Si se decidiera con un referendo, Tsipras no podría asegurar la victoria”.
Efecto dominó
Pase lo que pase en Grecia, coinciden especialistas, el nuevo pensamiento helénico se expandirá a los otros países, como España, que este año celebra elecciones generales.
“Incluso antes de las votaciones legislativas, Syriza había inspirado a varios partidos políticos europeos”, reportó Le Monde, “con esta victoria, los ojos estarán en España, donde el partido de izquierda radical Podemos sueña con un destino similar”.
Podemos y Syriza son de la ultraizquierda, pero también los partidos de extrema derecha se están beneficiando de la gente que quiere un cambio radical porque piensa que “ya no hay nada que perder”.
En Francia, el partido xenofóbico del Frente Nacional se perfila como uno de los favoritos para las elecciones presidenciales del 2017 gracias a su discurso anti UE.
“Desde las elecciones al Parlamento Europeo del año pasado, el voto ‘nada que perder’ beneficia únicamente al FN, único partido legítimo en los ojos de los electores decididos a usar su voto para provocar una situación de catástrofe destinada a vengarse de los supuestos autores de su infelicidad”, publicó Le Nouvel Observateur.
Esto mismo ocurre con los partidos de ultraderecha de la independencia del Reino Unido (UKIP) y la Alternativa por Alemania, que están en contra de la eurozona, de la desmesurada migración y del rescate económico de los países “ricos” a los “pobres”.
También se prevé que Irlanda y Portugal, otras dos naciones golpeadas por las políticas de austeridad y rescate de la UE, presencien coaliciones como la que Syriza realizó en Grecia.
Para los expertos esto es una alerta para los líderes de la UE, como Merkel, el presidente francés Francois Hollande y el primer ministro de Italia, Matteo Renzi.
“Última oportunidad para la coalición que gobierna Europa para entender que o hay un gran pacto para que Europa funcione y crezca o el proyecto europeo está en serio riesgo. Merkel, Renzi y Hollande deberían convocar una reunión de urgencia y ponerse a hablar en serio”, publicó ayer El País.
> Francia
Frente Nacional. Aunque es de ultraderecha y xenofóbico, el partido de Marine Le Pen coincide en que la UE debe ser menos invasiva. Es de los favoritos para ganar la presidencia en 2017.
> Alemania
Alternativa por Alemania. De derecha, este partido preocupa a la canciller Angela Merkel. Está en contra del euro y de que los países ‘ricos del norte’ rescaten a los ‘pobres del sur’.
> Gran Bretaña
Independencia del Reino Unido (UKIP). También de ultraderecha y xenofóbico, UKIP busca que Reino Unido corte sus alianzas políticas con la UE y deje de recibir a los migrantes.
> España
Podemos. El partido de extrema izquierda español, bajo el liderazgo de Pablo Iglesias, es favorito en las encuestas de estas elecciones del 2015. Comparte ideología con Syriza.
