Este miércoles, Ecuador presentó su defensa ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) respecto al asalto a la embajada mexicana en Quito, argumentando que fue un incidente “excepcional” y “aislado“. El embajador ecuatoriano ante Países Bajos, Andrés Terán, enfatizó que su país ha garantizado por escrito a México su compromiso de respetar y proteger su personal y sedes diplomáticas.
La acción policial ecuatoriana, que resultó en el arresto del exvicepresidente Jorge Glas, fue defendida como necesaria debido a que, según Ecuador, México había utilizado su sede diplomática en Quito para dar refugio a un individuo condenado por delitos de corrupción en dos ocasiones por tribunales ecuatorianos.
La segunda audiencia pública ante la CIJ sobre este incidente, celebrada hoy, ha sido el escenario donde ambas partes han expuesto sus argumentos. México acusó a Ecuador de transgredir normas del derecho internacional, mientras que Ecuador sostiene que la audiencia es “innecesaria e injustificada”, ya que han ofrecido garantías de que se trató de un acto excepcional.
Ecuador asegura que no atentará contra bienes de México
Ecuador afirmó que no existen amenazas actuales contra las propiedades mexicanas en el país y rechazó las insinuaciones de México sobre posibles nuevas incursiones en su embajada. El embajador Terán subrayó que el asalto fue un evento único y justificó la acción como una medida contra un individuo condenado por corrupción.
Las audiencias, tanto de México como de Ecuador, tienen como objetivo discutir las medidas cautelares solicitadas por México, mientras se espera el inicio del juicio y la sentencia final del caso. México busca que la CIJ exija a Ecuador tomar medidas para proteger sus instalaciones diplomáticas, propiedad y archivos.
El tribunal se retirará para deliberar sobre estas medidas cautelares, cuya decisión se anunciará en las próximas semanas. Sin embargo, aún no se ha fijado fecha para el inicio del proceso principal.
Foto: EFE