El Gobierno de Ecuador presentó este lunes una contrademanda contra México ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, argumentando que el Estado mexicano violó el convenio que regula el asilo diplomático al otorgar este beneficio a Jorge Glas, exvicepresidente durante el mandato de Rafael Correa.
La contrademanda ecuatoriana surge después de que México acusara a Ecuador de violar el carácter inviolable de las sedes diplomáticas al intervenir en la embajada mexicana en Quito para detener a Glas, quien enfrentaba una orden de captura y prisión preventiva.
Según el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador, la contrademanda también denuncia la presunta interferencia en asuntos internos por parte del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien vinculó el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio con las elecciones ecuatorianas.
La demanda de Ecuador busca que la CIJ declare que México ha incumplido sus obligaciones en relación con el respeto a las leyes y reglamentos del Estado receptor, así como la no interferencia en sus asuntos internos, según lo establecido en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961.
Además, Ecuador argumenta que México ha infringido sus obligaciones respecto a no otorgar asilo a personas procesadas por delitos comunes y entregarlas a las autoridades locales competentes, según lo establecido en las convenciones de asilo diplomático y asilo político.
El caso Jorge Glas en Ecuador
Jorge Glas enfrenta cargos relacionados con presunta malversación de fondos públicos en obras de reconstrucción posterior a un terremoto en 2016, así como condenas por cohecho y asociación ilícita en casos de corrupción.
Aunque un tribunal ecuatoriano declaró ilegal la detención de Glas por no respetar el procedimiento para allanamientos en sedes diplomáticas, el exvicepresidente permanece en prisión por una sentencia previa de ocho años.
La Organización de Estados Americanos (OEA) condenó la intervención en la embajada mexicana en Quito e instó al cumplimiento de las normas de asilo. Mientras tanto, Glas continúa recluido en la cárcel de máxima seguridad de Ecuador, donde recientemente sufrió una descompensación que lo llevó a ser hospitalizado temporalmente.