Para el Papa Francisco, el culpable de las acusaciones y los abusos sexuales dentro de la iglesia católica es el diablo, de quien habló de su poder en la actualidad.
Durante una conferencia, el Pontífice explicó que Satanás está trabajando para desvirtuar a la iglesia, lo que ha resultado en una crisis para los católicos del mundo.
“El diablo está vivo, goza de buena salud y está haciendo horas extra para erosionado a la Iglesia Católica”, afirmó el papa respecto a los casos de abuso sexual que han proliferado en los últimos meses.
Ante este problema, el Pontífice argentino pidió la ayuda de los católicos para que recen diariamente, y durante todo octubre, el rosario, así como rezos especiales a San Miguel.
“La iglesia debe ser salvada de los ataques del maligno, el gran acusador, y, al mismo tiempo, ser más consciente de su culpa, sus errores y abusos cometidos en el presente y el pasado”, explicó.
Los casos de abuso sexual han salido a la luz en distintas partes del mundo como Alemania y Chile; así como de los múltiples casos en Estados Unidos.
