La corresponsal de El País Ana Carbajosa informó el viernes del levantamiento de un campamento en el polémico territorio situado en Cisjordania. Polémico porque ese lugar es fundamental para garantizar una continuidad mínima en el futuro Estado palestino.
Sin embargo, después deque los palestinos lograran ser reconocidos como Estado observador ante la Asamblea General de Naciones Unidas, el primer ministro israelí, Benjamín Netanhayu, decidió acelerar los planes para ampliar las colonias, precisamente en esa zona.
Para impedir la construcción de más viviendas para los colonos en esa área, unos 250 palestinos procedentes de toda Cisjordania y de Israel se asentaron en parte de la zona, a la que dieron el nombre de Bab Al Shams (Puerta del Sol).
De esta forma, quieren defender pacíficamente el derecho a no ser expulsados de su territorio. Una de las activistas dijo que se quedaran el tiempo que haga falta.
Aunque el viernes por la mañana la policía israeli les entregó una orden de evacuación, la justicia ha paralizado de momento la resolución.
En total, más de medio millón de israelíes vive en asentamientos en Jerusalén oriental y Cisjordania.
