Venezuela tiene nuevo jefe de la policía política. Después de que el gobierno del presidente Nicolás Maduro anunciara que Manuel Cristopher Figuera sería el reemplazo de Gustavo González López para defender a sus funcionarios ante cualquier represalia nacional o internacional, uno de sus objetivos sin lugar a dudas será Estados Unidos, un estado que ha buscado atacar a políticos del país petrolero desde el año pasado.
Incluso el funcionario saliente, quien se había desempeñado como ministro de Relaciones Exteriores entre 2015 y 2016 en el país sudamericano, figura entre los altos funcionarios venezolanos sancionados por el gobierno estadounidense debido a presuntos abusos de los derechos humanos.
Figuera viene de desempeñarse como director general del Centro Estratégico de Seguridad y Protección de la Patria, a cargo del manejo de informaciones de todos los organismo de seguridad e inteligencia del estado, conocimientos que pondrá en acción respecto a las últimas represalias del país norte.
Una de las razones por las que Estados Unidos ha atacado a Venezuela es por la victoria de Nicolás Maduro en las últimas elecciones presidenciales, asegurando que era una farsa política que haya ganado.
Entre los personajes que Trump ordenó sancionar estaban la esposa de su homólogo latino, Cilia Flores; Vladimir Padrino López, ministro de defensa, y Delcy Rodríguez, vicepresidenta ejecutiva, a quienes les prohibió entrar a su país. Además, firmó un decreto para que el régimen de Maduro venda o garantice ciertos activos financieros venezolanos.
Respecto a dichas represalias, Maduro defendió a sus funcionarios en territorio norteamericano, cuando se celebró la Asamblea General de las Naciones Unidas, en Nueva York, donde, además, culpó a Estados Unidos de haber planeado el atentado en su contra a inicios de agosto pasado
Tras la confirmación de Figuera al frente de la policía política, el partido opositor Primero Justicia compartió en Twitter su postura: “Señalamos que el nuevo director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), el general Manuel Cristopher Figuera, es responsable de todos los abusos y torturas dentro de la Dirección General de Contrainteligencia Militar”.
