Un brote de COVID-19 en Seúl ha puesto en jaque a los coreanos debido a que tiene que localizar a más de 3 mil personas que acudieron a la zona de antros.
Según EFE, el brote obligó a retrasar una semana más la reapertura de colegios; pues se reportaron 35 nuevos contagios, 29 de los cuales surgió de una persona de 29 años que fue a la zona de antros.
Sin embargo, localizar a 3 mil 61 personas ha sido difícil, pues la mayoría, unos mil 982, dieron nombres y números de teléfonos falsos al haber acudido a establecimientos ligados a la comunidad LGBTI, muy discriminada y estigmatizada en ese país.
Las autoridades enviaron SMS a los teléfonos de los coreanos pidiendo que se hagan la detección de PCR y se aíslen 14 días aunque den negativo aCovid-19.
El brote se detectó el 6 de mayo, justo cuando no había confinamiento y el virus parecía controlado. Incluso, las clases presenciales estaban previstas reiniciar este 13 de mayo.
Chung subrayó la necesidad de que se hagan test de manera rápida a todas estas personas para evitar que los contagios se multipliquen en Seúl y su región aledaña, donde viven unos 26 millones de personas, más de la mitad de la población del país.
A su vez las autoridades sopesan la posibilidad de acabar multando a quienes estuvieron en dichos bares si finalmente no cooperan.
?Desde la comunidad humanitaria tenemos un mensaje para ti.
Por los millones de vidas en pausa por #COVID19.
Por tu familia.
Por ti.
Escucha. Infórmate. Protege. ?
#ConoceProtegeActúa #REDLAC #SaludParaTodos pic.twitter.com/N0iSaPfHma— OPS/OMS (@opsoms) May 11, 2020