Ataques a bases aéreas en Irak: venganza iraní
Dos bases militares estadounidenses en Irak fueron atacadas con más de doce misiles. Las fuerzas iraníes se adjudicaron el operativo después de que el general Qasem Soleimani murió en un ataque ordenado por el presidente Donald Trump
Mariana RecamierMás de doce misiles balísticos impactaron el martes en la noche dos bases aéreas que albergan tropas estadounidenses en Irak.
La operación se produjo después de que el general iraní Qasem Soleimani muriera el pasado viernes por un ataque con aviones no tripulados en Bagdad que fue ordenado por el presidente Donald Trump.
El nombre del primer lugar atacado es Ayn-alAsad y el otro está ubicada en la ciudad de Erbil. Minutos después del operativo, el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán informó que había golpeado la base aérea de Ayn-al-Asad con decenas de misiles, de acuerdo con un comunicado difundido en la televisión estatal del país de Medio Oriente.
El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria también amenazó con golpear a Israel y a los gobiernos aliados de Estados Unidos.
“Les estamos advirtiendo a todos los aliados estadounidenses que cualquier territorio que sea el punto de inicio de actos agresivos contra Irán será atacado’’, afirmaron las Fuerzas Armadas.
Los Guardianes también instaron a Estados Unidos a llamar de retorno a sus soldados desplegados en la región para evitar sus muertes.
“¡Hasta aquí todo bien! ¡Tenemos el ejército más poderoso y bien equipado en cualquier parte del mundo, con diferencia! Haré una declaración mañana por la mañana”, publicó Trump en su cuenta de Twitter.
Por su parte, el Pentágono confirmó en un comunicado que más de una decena de misiles balísticos impactaron en las dos bases que albergan tropas estadounidenses en Irak.
“Está claro que estos misiles fueron lanzados desde Irán y apuntaron al menos a dos bases militares iraquíes que albergan a personal del ejército de Estados Unidos”, señala el documento.
El sábado pasado, Trump advirtió que Estados Unidos tenía 52 objetivos iraníes para atacar si es que Teherán tomaba alguna clase de represalia y cumplía con su amenaza de una severa venganza.
No obstante, el presidente de Estados Unidos retiró su amenaza de atacar objetivos iraníes el martes y se comprometió a obedecer las leyes internacionales sobre Patrimonio de la Humanidad.
Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, aseguró que los legisladores están evaluando la situación tras los ataques y que buscarán garantizar la seguridad de las tropas estadounidenses en Irak.
“Seguimos de cerca la situación tras los bombardeos contra las tropas estadunidenses en Irak. Debemos garantizar la seguridad de los miembros del servicio, incluso poner fin a las provocaciones innecesarias de la administración y exigir que Irán cese su violencia. América y el mundo no pueden permitirse la guerra”, comentó Pelosi.
El ataque fue realizado 24 horas después de que el gobierno Estados Unidos informó “por error” de su intención de retirar las tropas del territorio iraquí a través de una carta que luego fue rectificada.
“Retirar las tropas estadounidenses es lo peor que podría pasarle a Irak… Queremos salir en algún momento, pero este no es el momento correcto”, dijo Trump el martes.
Más de 5 mil soldados estadounidenses permanecen en Irak como parte de una coalición que entrena y respalda a las fuerzas de seguridad iraquíes contra la amenaza de los militantes del Estado Islámico.
Al contrario, Canadá y Alemania anunciaron el martes el traslado de parte de sus soldados a Jordania y Kuwait. La OTAN decidió retirar parte de su personal de Irak.
También hay respuestas al interior de Irán. El parlamento iraní votó el martes una ley que considera terroristas a todas las fuerzas armadas de Estados Unidos tras el asesinato de Soleimani.
En Estados Unidos y en otros países ya se está debatiendo sobre la legalidad del ataque en el que murió Soleimani. El secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo dijo que Trump hizo una revisión completa y profunda de la base legal antes de realizar ataque que provocó la muerte del líder militar.
¿Qué lugares se atacaron en Irak?
La base aérea de Ayn-al-Asad se encuentra en la provincia occidental de Anbar en Irak. Fue utilizada por primera vez por el ejército de Estados Unidos después del operativo en 2003 que derrocó al dictador Saddam Hussein.
El vicepresidente Mike Pence visitó las instalaciones de Ayn-al-Asad a finales del año pasado, mientras que el presidente Donald Trump estuvo ahí en diciembre de 2018.
Según el Pentágono, el otro blanco es una base ubicada en Erbil, en la región kurda semiautónoma de Irak. Es la cuarta ciudad más grande de Irak después de Bagdad, Basora y Mosul.