Todos amamos salir de vacaciones, es el momento en que abandonamos la rutina y nos desconectamos del trabajo o la escuela; sin embargo, esta excesiva relajación puede hacer que descuidemos nuestras finanzas y gastemos de más por dejarnos llevar por la emoción.
Pero no te preocupes, eso no quiere decir que nunca debes salir de la ciudad o que tengas que resignarte al famoso “Acapulco en la azotea”. Aquí te vamos a dar una serie de consejos para que no dejes en ceros la cartera y ahorres durante tus muy merecidas vacaciones.
La clave para pasar unas buenas vacaciones es la planeación. Esto implica ahorrar, presupuestar y elegir con sabiduría el lugar al que iremos; ya sea solos, en pareja o con toda la familia.
No salgas en temporada alta
Un error que cometen muchas personas es salir de viaje en temporada alta, por ejemplo, en Semana Santa, vacaciones de verano o Navidad. Y es que son estas fechas donde las aerolíneas y los hoteles aumentan sus precios de manera desproporcionada.
Nuestro consejo es que compres y reserves para fechas y días en los que la gente usualmente no suele viajar; por ejemplo, en el periodo de septiembre a octubre y mucho mejor si lo haces entre semana.
Y si quieres viajar en las fechas más concurridas del año, lo mejor es que compres y reserves con bastante anticipación; de esta manera evitarás los precios desproporcionados.
Que el destino sea acorde a tus ingresos
Sabemos que Cancún y todo el Caribe Mexicano son lugares verdaderamente hermosos, pero quizá tu salario no es suficiente para viajar hasta allá y sobre todo pagar el hospedaje y los alimentos.
Lo cierto es que México es un país multidiverso, con más de 450 playas, 132 pueblos mágicos y mil 177 museos en los 32 estados, esto según datos del Inegi y la página Visit México.com. Es decir, tiene un sinfín de lugares y precios para pasarla bien y sin gastar de más.
Comparte los gastos y ahorra
Si los precios de avión te parecen excesivamente caros, también puedes moverte en automóvil por las cientos de carreteras del territorio nacional; sin embargo, es necesario que hagas un presupuesto de gasolina y casetas.
En este caso, lo mejor que puede hacer es salir con amigos y familiares, para que entre todos se dividan la suma. No es lo mismo que una persona sola pague 3 mil pesos, a que se divida esa cantidad entre cinco individuos y cada uno pague 600 pesos.
¿Realmente necesitas un hotel de cinco estrellas?
Otro error que podemos cometer siendo viajeros primerizos es pagarnos el hotel más bonito y exclusivo del lugar, pero resulta que con tantas actividades en el exterior apenas llegamos a nuestra habitación a dormir. Mejor busca un lugar más accesible, aunque no sea el más espectacular.
Ahora que si el hotel ofrece actividades, tiene una piscina hermosa y eventos de entretenimiento de todo tipo, ahí sí conviene pagar un hotel de mayor precio, pues pasarás gran parte del día dentro de él o asesorado por uno de sus guías.
Come en restaurantes, pero no tres veces al día
Cuando salimos de viaje, una de las cosas que más nos llama la atención es probar comida diferente, típica del lugar al que vamos; claro, la experiencia gastronómica es parte fundamental del viaje, pero lo mejor es que procedamos con cautela.
Que no te dé pena ir al súper o a la tiendita de la esquina para comprar ingredientes para hacerte unos sandwiches de cena o desayuno, mientras que en la comida sí puedes ir a algún restaurante para probar los platillos típicos y más exóticos del lugar.
Piensa en esto: cuando estás en tu ciudad y cenas en un buen restaurante, es poco probable que al día siguiente desayunes en un lugar similar, probablemente optes por hacerlo en casa para no volver a gastar; pues el mismo criterio debes aplicar en vacaciones.
También hay hoteles que ya incluyen los alimentos, pero si vas a contratar estos paquetes deberás atenerte a lo que te sirvan, si no terminarás gastando dentro y fuera del hotel con los famosos antojos.
Tarjeta de crédito, sólo para emergencias
Tanto en la vida como en las vacaciones, debemos tener mucho cuidado en cómo utilizamos la tarjeta de crédito, puede que estés en un lugar diferente, pero las deudas también volverán contigo cuando regreses a casa; así que sólo contempla estas tarjetas para una emergencia.
Cuando estamos en un lugar turístico, nos acordamos de mucha gente a la que nos gustaría llevarle un recuerdito; está bien, puedes hacerlo, pero lo mejor es que compres en mercados locales y alejados de las zonas turísticas.
Piensa bien a quién vale la pena que le lleves un souvenir, probablemente tu familia más cercana merezca un buen regalo, pero no pasa nada si no le llevas algo a ese amigo o primo que ves un par de veces al año.
No te salgas del presupuesto
Y lo más importante de todo es que te apegues a un presupuesto, pues si gastas de más durante el viaje, es probable que luego sientas arrepentimiento por la manera en que te dejaste llevar por la emoción.
Las vacaciones deben ser un momento de relajación y felicidad, pero si gastas de más o regresas con deudas, lo único que vas a hacer es traer más estrés a tu vida diaria; por lo que lo mejor es que te moderes con el dinero.
Así que ya lo sabes, sí se puede salir de vacaciones y ahorrar durante el proceso, todo es cosa de que planifiques, te moderes y sea muy flexible con tus planes de viaje. ¡Buena suerte!
