En los últimos meses, diferentes medios de varios países han publicado artículos señalando qué tan bien se ha desempeñado la economía en México, a pesar de la guerra contra el narcotráfico y la crisis financiera mundial.
Escuchamos sobre cómo México está creciendo más rápido que Brasil, cómo tiene más ingenieros graduados que Alemania, y como la tasa de emigración de México hacia Estados Unidos ha llegado a cero por dos años consecutivos.
Esto nos pinta una idea de un país que está mejorando o, al menos, que no está tan mal. Sin embargo, pienso que es necesario ver más a detalle los datos que nos pintan esta fabulosa imagen y ver en realidad en qué está basado nuestro optimismo.
México está creciendo más que Brasil, pero esto no es porque México esté creciendo muy rápido, sino porque Brasil ha dejado de hacerlo.
Se predice que México cerrará el 2012 con un crecimiento de alrededor del 4 por ciento, mientras que Brasil con alrededor del 2 por ciento. Sin embargo, México tuvo un crecimiento del 5.5 por ciento en el 2010 y del 4 por ciento en el 2011. Brasil, en cambio, tuvo un crecimiento del 7.5 por ciento en 2010 y de 2.7 en 2011.
Esto quiere decir que la tendencia en general para los dos países es de bajada o sin cambio, por lo tanto nos estamos dando un palmada en la espalda por no ir en declive tan rápidamente como los cariocas.
Cabe mencionar que una de las razones por las que Brasil ha dejado de crecer tanto es que China también ha dejado de hacerlo, y éste último es uno de los mayores mercados para las exportaciones brasileñas.
Esto muestra que nuestro “triunfo” no se debe (al menos en gran parte) a acciones por parte de México, sino a que las circunstancias económicas de otros países no han sido tan favorables para ellos.
Desarrollo tecnológico
Se dice que México gradúa a más ingenieros que Alemania, y sin embargo en el 2004 Alemania obtuvo más de 100 veces la cantidad de regalías por patentes que México. Las regalías de Alemania han aumentado más de 250 por ciento desde entonces, y aunque no encontré datos más recientes para México, dudo que se le acerque.
Y ya que nos encanta compararnos con Brasil, este país obtuvo más del doble en regalías que México en 2004. Este número ha aumentado por más del 500 por ciento desde entonces.
México no tiene ninguna compañía de ingeniería que se le compare a las brasileñas Petrobras o Embraer (y ni siquiera hablemos de las firmas alemanas). De poco le sirve al país graduar tantos estudiantes de ingeniería si al terminar no encuentran trabajos en desarrollo tecnológico.
Se celebra que la tasa de emigración de México hacia Estados Unidos ha llegado a cero, pero hay que pensar un poco en el porqué.
La migración hacia Estados Unidos es por necesidad. La mayoría de la gente que se va de su tierra lo hace porque tiene que buscar oportunidades en otra parte porque su propio país no se las ofrece.
Aunque la industria manufacturera está creciendo en México, esto no se ha reflejado en el crecimiento del país.
Otras teorías que explican el por qué de esta reducción de la tasa de migración dicen que se debe a la reducción en la tasa de crecimiento de Estados Unidos, el incremento de seguridad en la frontera, el incremento de deportaciones, y el incremento en la inseguridad a la que se exponen los migrantes al tratar de cruzar México para llegar a la frontera.
El crecimiento que tiene México no es sustentable porque carece de agencia y se debe más a las circunstancias en otros países.
La razón por la que el sector manufacturero está creciendo en México es porque ya no es tan barato producir en China debido al aumento en sus salarios mínimos y en el costo del combustible para los barcos.
Fomentar créditos e impulsar la educación
La razón por la que Brasil, China e India se han levantado es porque han invertido en el desarrollo de su propia tecnología, así como lo hicieron varios siglos atrás los países que ahora son desarrollados.
En 2007 India invirtió 0.8 por ciento de su PIB en investigación y desarrollo. Brasil invirtió 1.1 por ciento y China 1.4 por ciento. México invirtió 0.4 por ciento.
Un paso en la dirección correcta sería mejorar el proceso jurídico que regula la propiedad intelectual en México, incentivando así el desarrollo tecnológico en las compañías mexicanas.
Al mismo tiempo, el emprendedurismo es un componente crucial del desarrollo, ya que genera empleos y contribuye al crecimiento.
Para fomentar esto es necesario que haya más acceso a créditos (como los “venture capitalists” de Estados Unidos) que provean de capital necesario para empezar empresas.
Otra de las razones por las que el crecimiento mexicano no es sustentable es la fuerte dependencia de nuestra economía sobre el petróleo. No hemos sabido utilizar bien este recurso, y Pemex se ha convertido en la fuente de ingresos del gobierno (que a su vez no invierte en la compañía).
Además de que México debe de invertir más en desarrollo tecnológico, debe aprender a diversificar los sectores que serán la base de su crecimiento para así tener estabilidad. Un área en la que es muy importante que México invierta es en energía.
Finalmente, es imperativo invertir en la educación. Esta es la inversión más importante que puede hacer un país, pues esta inversión en desarrollo tecnológico también requiere de capital humano.
Además, no se puede tener democracia cuando la población carece de pensamiento crítico.
Julio Herrera Estrada cursa posgrado en Ingeniería Ambiental y Recursos de Agua en la Universidad de Princeton.
