El contenido es rey

El acuerdo de adquisición de Time Warner por parte de AT&T representa la operación de consolidación en el sector de los medios de comunicación más grande de  los últimos quince años. 

 

Rodrigo Carbajal Rodrigo Carbajal Publicado el
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15%
de los ingresos totales de la nueva firma combinada serán aportados por la división de Time Warner
El enfoque que AT&T persigue es el de convertirse en la primer firma de servicios móviles en Estados Unidos cuya oferta de contenido en internet pueda competir directamente con la televisión restringida
El mundo de la distribución y el contenido están convergiendo, por lo que necestiamos movernos rápido si queremos hacer algo verdaderamente único(…)todo se trata de movilidad” 
Randall StephensonDirector general de AT&T

El acuerdo de adquisición de Time Warner por parte de AT&T representa la operación de consolidación en el sector de los medios de comunicación más grande de  los últimos quince años. 

 

AT&T es una firma de telecomunicaciones que ofrece servicio de telefonía móvil, internet y televisión de paga mediante DirectTV, empresa que adquirió el año pasado por 49 mil millones de dólares. 

 

Por su parte, Time Warner es un emporio de medios que reúne un amplio portafolio de contenido que incluye a CNN, HBO, TBS y el estudio de cine Warner Bros. 

 

Más allá de una apuesta tradicional de escala y sinergias de costos de una empresa individual, la oferta de adquisición de 108.7 mil millones de dólares (incluyendo deuda neta) significa el último síntoma de una reconfiguración de 180 grados de la industria de las telecomunicaciones. 

 

La oleada de adquisiciones de empresas de medios y entretenimiento por parte de firmas de telecomunicaciones deja ver la creciente relevancia que juega la generación de contenido para las firmas que lo distribuyen mediante plataformas de televisión de paga o servicios de datos móviles. 

 

En el 2011, la operadora de cable Comcast compró NBCUniversal. Posteriormente, el gigante de telecomunicaciones también adquirió a DreamWorks Animation. El consenso de analistas coincide en que ambas operaciones de consolidación han sido redituables para Comcast. 

 

Asimismo, este año, Verizon, una de las firmas líderes de servicio de telefonía móvil en Estados Unidos, pagó 4.8 mil millones de dólares para hacerse del control del negocio central de Yahoo, un generador de contenido en línea. 

 

Además, ésta no es la primera vez que Time Warner se convierte en un objetivo de adquisición. 

 

Hace dos años, la compañía de medios rechazó una oferta de compra de parte de su rival 21st Centrury Fox.

 

De igual forma, este año, según un reporte del diario Wall Street Journal, Apple se aproximó a Time Warner para tantear los términos de una posible adquisición. 

 

La lógica detrás de la adquisición

 

El interés de AT&T por convertirse en uno de los conglomerados de medios más importantes del mundo está íntimamente ligado con la desaceleración en el número de suscriptores de telefonía móvil que la compañía añade cada trimestre. 

 

Pese a que AT&T es el segundo mayor proveedor de servicios de datos móviles en Estados Unidos, la firma ha perdido terreno frente a opciones de menor costo con planes de datos ilimitados como los de los operadores T-Mobile y Sprint. 

 

El rápido crecimiento de la base de suscriptores de T-Mobile contrasta con las cifras de AT&T en ese rubro. En los últimos ocho trimestres, ha disminuido la tasa de crecimiento de suscriptores de servicios móviles de la compañía. 

 

En ese sentido, AT&T pretende retener a sus clientes mediante la oferta de contenido de alta calidad  que esté exento de consumir datos en sus planes de telefonía móvil. Esta estrategia de “datos selectos gratis” busca conectar a más de 130 millones de sus clientes con el incipiente negocio de video bajo demanda de Time Warner. 

 

Probablemente, el máximo exponente de este producto es la plataforma en línea de HBO, que en el segundo trimestre de este año generó 1.5 mil millones de dólares en ventas. 

 

La lógica detrás del acuerdo de adquisición de Time Warner quedó de manifiesto en la declaración de Randall Stephenson, director general de AT&T: “El contenido premium siempre gana”. 

 

Actualmente, AT&T ya aplica el modelo de “datos selectos gratis” para cierto contenido de DirectTV. 

 

Integración vertical

 

La operación de integración vertical, en la que una empresa se hace del control de uno de sus proveedores o viceversa, pretende convertir a AT&T, un distribuidor de contenido, en una entidad con control sobre dicha oferta de medios y entretenimiento. 

 

El auge de la penetración de servicios de telefonía móvil e internet, la creciente preponderancia de las redes sociales como administradoras de contenido y la irrupción de plataformas de video bajo demanda como Netflix han cambiado para siempre las reglas del juego en la industria de telecomunicaciones. 

 

El enfoque que AT&T persigue es el de convertirse en la primer firma de servicios móviles en Estados Unidos cuya oferta de contenido en internet pueda competir directamente con la oferta de contenido de la televisión restringida. 

 

Esto le permitiría a la compañía acrecentar su tasa de expansión orgánica y su influencia para la determinación de tarifas, dos elementos clave para asegurar una rentabilidad sostenida en el largo plazo.

 

Además, la adquisición emerge como una operación natural de diversificación para AT&T. Se espera que Time Warner contribuya con el 15 por ciento de los ingresos totales de las dos firmas combinadas. 

 

Aunque el racional estratégico de la operación es claro, existe un fuerte escepticismo respecto a que se pueda consolidar el acuerdo de adquisición. Los evidentes obstáculos políticos, que piden que las autoridades antimonopolio detengan la compra, se han puesto de manifiesto en las declaraciones recientes de los equipos de campaña de los dos candidatos punteros a la elección presidencial de Estados Unidos.

 

Por otra parte, la capacidad financiera de AT&T, cuya deuda neta llega a casi 120 mil millones de dólares, se ha puesto en tela de juicio por parte de las  firmas calificadoras de deuda.

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