En los últimos seis años la piratería se incrementó en un 584 por ciento y alcanzó ganancias de 75 mil millones de dólares anuales, entre las cuales el 7 por ciento viola derechos autorales de artistas plásticos como pintores, escultores, grabadores, fotógrafos y diseñadores gráficos, asegura Paul Achar Zavalza.
El presidente de la Sociedad Mexicana de Autores de las Artes Plásticas (Somaap) que agrupa a más de 10 mil artistas, mencionó que aunque es un hecho que la piratería es un sector dominado por el crimen organizado, también lo fomenta la sociedad.
“Lamentablemente pasa desapercibido hasta por los propios ciudadanos que, ilegalmente, bajan imágenes de la red sin pagar los derechos de autor correspondientes”, dijo Achar Zavalza.
Durante este año, de acuerdo al estudio Ipsos, se descargaron ilegalmente mil 812 millones de imágenes y el 56 por ciento lo hicieron cibernautas de las clases socioconómicas A, B y C+, lo que representa ingresos no generados de 5 mil 623 millones.
Si además se considera la piratería en audios, películas y e-books la cifra se incrementa a 16 mil 22 millones de pesos.
“Es importante recordar que esto solo corresponde a la piratería en Red, pero cada vez es más preocupante que la gente asuma este delito, en el que está implicado el crimen organizado, como cotidiano, tolerable y hasta emulable”.
Lo más grave es que instituciones como Conaculta aún adeudan 10 millones de pesos por derechos de autor a los creadores, refiere Achar.
De acuerdo al presidente de Somaap, “ante tales condiciones no es raro que sólo el 13 por ciento de los creadores en México se decidan a proteger su obra contra plagios, réplicas ilícitas y copias apócrifas”.
La desprotección a los artistas, que se manifiesta claramente al haber desechado el Acuerdo Comercial contra la Falsificación (ACTA por sus siglas en inglés), resulta ilógico si se considera que el 9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) lo aporta el sector artístico del país, y México aparece entre las principales 20 naciones que exporta arte al mundo.