El sector manufacturero del país entró al último trimestre del año con un desempeño que sugiere una pérdida de dinamismo si se le compara con el cierre de año del periodo de apertura luego de la pandemia y con el año pasado, cuando el sector ya se encontraba en desaceleración.
Al respecto, en octubre el personal ocupado perteneciente al sector manufacturero disminuyó 0.1%, además de que las horas trabajadas en dicha actividad cayó 0.5%, de acuerdo con las cifras ajustadas por estacionalidad expuestas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
“Por tipo de contratación, el personal dependiente de la razón social retrocedió 0.1 % , el número de las y los obreros y técnicos en producción disminuyó 0.1% y el de las y los empleados administrativos, contables y de dirección no presentó variación; por su parte, el personal no dependiente se mantuvo”, expuso el instituto en un comunicado de prensa.
De lo anterior que las horas trabajadas dentro del sector registraran un descenso generalizado respecto al personal que labora desde la industria alimentaria, la fabricación de plástico y hasta la fabricación de equipo de transporte, por mencionar.
“Según la categoría de las y los ocupados, las horas que trabajó el personal no dependiente de la razón social bajaron 1.8% y las del personal dependiente, 0.5 %; las trabajadas de las y los obreros y técnicos en producción disminuyeron 0.7 % y las de las y los empleados administrativos, contables y de dirección, 0.3%”, destacó Inegi.
Reflejo de un panorama adverso
Otra prueba de que el sector manufacturero ha perdido dinamismo puede encontrarse el desempeño del Indicador de Pedidos Manufactureros (IPM) que permite conocer las expectativas y la percepción de los directivos empresariales sobre el comportamiento de la industria nacional.
Al respecto, el Banco de México (Banxico) expuso que en octubre dicho indicador registró una caída mensual de 1.57 puntos y se situó en un nivel de 49.6 puntos, después de haberse ubicado durante los dos meses previos por arriba del umbral de los 50 puntos.
“Se observaron retrocesos mensuales en los rubros referentes a los pedidos esperados, a la producción esperada y a la oportunidad en la entrega de insumos por parte de los proveedores, en tanto que aumentaron los correspondientes al personal ocupado y a los inventarios de insumos”, puntualizó Banxico respecto al resultado del IPM en octubre.
La tendencia del indicador plantea que el sector manufacturero mexicano se encamina a cerrar 2024 desacelerando su ritmo de crecimiento de forma significativa, incluso planteando una contracción al interior de la industria.
