Santa no llegará este año

El tradicional auge bursátil decembrino, conocido como “Santa Claus Rally”, no llegará a México este año. 

Desde septiembre, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), la muestra de las 35  empresas listadas más representativas del mercado de valores, ha perdido 11.23 por ciento de su valor. 

Cada año, los principales mercados accionarios del planeta reciben un impulso en el mes de diciembre. 

Rodrigo Carbajal Rodrigo Carbajal Publicado el
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por ciento cayó el IPC de la bolsa mexicana de valores durante las operaciones del día de ayer, calificado por analistas como un lunes negro
El administrador de fondos Blackrock sitúa a México con un nivel de riesgo país similar al de Sudáfrica e Indonesia 

El tradicional auge bursátil decembrino, conocido como “Santa Claus Rally”, no llegará a México este año. 

Desde septiembre, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), la muestra de las 35  empresas listadas más representativas del mercado de valores, ha perdido 11.23 por ciento de su valor. 

Cada año, los principales mercados accionarios del planeta reciben un impulso en el mes de diciembre. 

El “Santa Clause Rally” es un fenómeno comprobado por la firma S&P Dow Jones Indices, encargada de la elaboración del índice de referencia S&P 500.  

La empresa concluyó que el retorno a la inversión en activos de renta variable es sustancialmente mejor en diciembre que en el promedio registrado el resto del año.

El año pasado, a pesar del efecto negativo del crudo invierno en los mercados de valores de México y Estados Unidos, el IPC creció 2.87 por ciento entre el 17 de diciembre y el 30 de diciembre.

La bolsa mexicana de valores reanudó operaciones el día de ayer dado que el pasado viernes fue día festivo.  

Por lo tanto, el mercado se ajustó de manera más drástica. Ayer, el IPC cayó un 3.29 por ciento. Las grandes  empresas mexicanas, principales componentes del índice, sufrieron las pérdidas más significativas.

Las acciones de América Móvil, la empresa mexicana privada más grande del país, perdieron 4.65  por ciento el día de ayer. Cemex, la segunda cementera más importante a nivel global, cayó 5.49 por ciento.

Peñoles, Alsea, Televisa y Alfa perdieron 5.88 por ciento, 5,49 por ciento, 5.13 por ciento y 5.06 por ciento respectivamente.

Coyuntura frágil

La tormenta financiera mexicana se ha profundizado en los últimos días. La conjugación de un espiral de depreciación del peso mexicano con la caída internacional de los precios del petróleo y la creciente preocupación por la seguridad jurídica del país coinciden con la fuerte baja en la bolsa mexicana de valores.

La divisa mexicana registra una caída de más de once por ciento frente a su similar estadounidense desde el inicio de septiembre. El dólar spot se negociaba ayer al mediodía a 14.79 pesos.

Además, la mezcla mexicana de petróleo se cotiza en alrededor de los 53 dólares después de que en junio alcanzó un precio superior a los 100 dólares por barril. 

A pesar de que la contratación de las coberturas petroleras por parte de la Secretaría de Hacienda aseguran la viabilidad del presupuesto en el 2015, esto significa una presión para la reducción planeada del déficit fiscal, prioridad establecida en los lineamientos generales de política económica de la Secretaría de Hacienda.

El último anuncio de política monetaria del Banco de México destaca que el dinamismo económico del país registró una moderación en el ritmo de crecimiento durante el tercer trimestre del año. 

El banco central “considera que el balance de riesgos para la actividad económica se ha deteriorado respecto de la anterior decisión de política monetaria”.

México, país riesgoso

Blackrock, el administrador de fondos más grande del mundo, sitúa a México con un nivel de riesgo país similar al de Sudáfrica e Indonesia.  

La firma, que tiene bajo su tutela más de 4.3 billones de dólares en activos, considera que países como Brasil, Rusia, China y Malasia cuentan con un riesgo soberano menor al de México.

El país se compara con otras 12 economías emergentes y se le asigna una puntuación de cero a cien, donde un mayor puntaje implica un mayor riesgo. 

El rango de estos países va desde los 21 puntos de Rusia hasta los 45 puntos de Argentina.  México se ubica como el valor mediano dentro del rango, registrando 33 puntos.

La firma identifica dos focos rojos para México, uno relacionado con la flexibilidad fiscal y presupuestaria, así como uno relativo a la posición financiera externa.

El primero tiene que ver con qué tan cerca está un país en llegar a un nivel de deuda tal que vuelva factible la posibilidad de una suspensión de pagos.  

El segundo refiere la posición de la cuenta corriente en la balanza de pagos del país.

Además, en otra muestra de entre 13 países emergentes, México es catalogado como el segundo país con las acciones más caras del mundo. 

El país cuenta con la segunda relación precios-valor en libros más alta de la muestra, únicamente debajo de Indonesia.

El reporte anual sobre perspectivas de inversión de la firma señala que el país se beneficiará del creciente momento económico de Estados Unidos. Agrega que el país está encaminado positivamente en el rumbo reformatorio.

Sin embargo, advierte que los beneficios de las reformas tardan años en volverse evidentes, por lo que frecuentemente representan una carga para la economía en el corto plazo. 

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