El Producto Interno Bruto de México crece y rompe todos los pronósticos
Aunque los analistas de mercado esperaban que el PIB del país alargara su lento avance, la información dada a conocer por Inegi sugiere que es necesario replantear las estimaciones de crecimiento para este y el próximo año
Gabriel NavaUn sorpresivo avance del Producto Interno Bruto nacional rompió con la tendencia a la baja que marcó la primera parte del 2024, lo que ha puesto en entredicho a las estimaciones que han sugerido que la economía del país podría perder más dinamismo o incluso entrar en recesión.
En el tercer trimestre del año el Producto Interno Bruto (PIB) de México creció 1.0 por ciento, con cifras ajustadas por estacionalidad, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi); un dato que superó al consenso de mercado.
Al respecto, mientras que los analistas financieros esperaban un crecimiento del 0.7 por ciento, el PIB logró avanzar por encima de esa estimación e incluso anotó el mayor resultado del indicador desde el segundo trimestre del año pasado, lo que incluso podría reformular la perspectiva que se tiene sobre el escenario nacional a corto y mediano plazo.
“El repunte del trimestre se explica a una mejoría de los tres sectores productivos. La sorpresa al alza se relaciona con una mayor resiliencia que la estimada del consumo y la inversión, que podría reflejar, en parte, efectos rezagados del incremento del gasto público del primer semestre”, destacó sobre el resultado del PIB la dirección de estudios económicos de Citibanamex.
Además, el resultado obtenido por el PIB en el periodo de julio a septiembre de este año descartó del escenario base una recesión dentro del país al romper con la atonía que había mantenido al indicador en franca desaceleración trimestres atrás, contexto que ha motivado a que las expectativas sobre México plantearan un avance no mayor al 1.5 por ciento al cierre de 2024.
Aunado a ello, cuestiones como la tasa de desocupación situándose en mínimos históricos, una mayor recaudación tributaria y una deuda pública todavía en estándares aceptables para economías emergentes, han contribuido para que al menos en la última parte de este año, la economía mexicana todavía demuestre resiliencia.
“El consumo privado todavía encontrará apoyo en la solidez del mercado laboral y el crecimiento en salarios. No obstante, prevemos una moderación adicional en el gasto más discrecional, ya que la generación de empleo ha perdido fuerza, y la inflación y las tasas de interés, aunque disminuirían algo más, permanecerán elevadas”, advirtió sobre el panorama a futuro Alejandro Saldaña, economista en jefe del grupo financiero BX+.
México conserva los elementos macroeconómicos necesarios para avanzar
Pese a las consideraciones que se han generado respecto al escenario nacional, los considerados motores de la economía nacional, como se les ha llamado a diversas variables que han resultado definitorias para dinamizar la actividad económica del país, continúan en buen estado, como es el caso del consumo interno, sostuvo la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
“La demanda interna se mantuvo como el pilar del crecimiento económico. En el promedio de enero a julio, el consumo privado aumentó 3.8 por ciento anual, con lo que hiló cuatro años de crecimiento continuo por arriba de su promedio histórico, en línea con el desempeño positivo de la confianza del consumidor y el aumento de los salarios reales. Por su parte, la inversión registró un incremento anual de 8.2 por ciento en el mismo periodo, liderada por el sector privado que alcanzó niveles máximos”, expuso la institución en su informe sobre la situación económica del país más reciente.
Por otro lado, más allá de la desaceleración económica que se ha vivido durante los últimos meses, el estado del escenario mexicano conserva la fortaleza suficiente como para continuar impulsando al país, tal como lo ha resaltado la Asociación de Bancos de México al puntualizar que “si a la banca le va bien, es porque la economía va bien”.
¿Será suficiente para sortear un escenario de bajo crecimiento?
El dato del PIB para el tercer trimestre de este año ha generado opiniones divididas ante el hecho de que sea suficiente para labrar el camino hacia un mayor crecimiento subsecuente; ya que, por un lado, las autoridades hacendarias destacaron a este medio que el resultado positivo dado a conocer hoy por Inegi ya se tenía contemplado por ellos, de tal modo que incluso descartan un escenario recesivo a corto y mediano plazo.
En amplio contraste, los analistas de mercado no consideran que el resultado del PIB pueda modificar el escenario, de menos complejo, que han estimado, pues, “Tras la aceleración, creemos que los retos en los siguientes trimestres ganarán relevancia, los vientos en contra para la economía se están haciendo más presentes, tanto de índole externa como interna. Incluso con los factores climatológicos jugarían un papel importante”, como lo apuntó la dirección general adjunta de análisis económico y financiero de Banorte.