Este año el salario mínimo tendrá un nuevo incremento del 22 por ciento. Esto representa que a partir del lunes 1 de enero, nadie puede ganar menos de 7 mil 500 pesos mensuales. Sin embargo, el resto de sueldos parece mantenerse estático, ¿por qué?
La administración actual ha tenido una política salarial para fortalecer el salario mínimo. De esta manera se busca recuperar un poder adquisitivo que fue perdiéndose desde la década de los años 70.
Sin embargo, parece que se han dejado de lado las remuneraciones que actualmente ya superan al mínimo. Y pese a ello, aún son insuficientes para tener una vida digna y que de cualquier manera continúa en la pérdida de poder de compra.
🚨Desde el 1ro DE ENERO entró en VIGENCIA EL SALARIO MÍNIMO🚨
🤑Si tienes trabajadores y les pagas el salario mínimo o TÚ eres ese trabajador recuerda tomar en cuenta esto…👇🏼
— Tu Laboralista de Confianza💖 (@laboralistaconf) January 2, 2024
Según Enrique Terrazas, de la iniciativa México Digno para El Economista, en México, el 65.8 por ciento del valor generado por las empresas va para accionistas y 33.1 por ciento para el personal que las produce.
El especialista indicó que en Estados Unidos la proporción es 18 por ciento, accionistas; 71 por ciento, personal. Y en la Unión Europea es 25 por ciento, accionistas; 73.6 por ciento, colaboradores.
¿Por qué el salario mínimo sube, pero el resto no?
Según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), en México hay 12.5 millones de personas que percibían más de dos salarios mínimos. Es decir, reciben sueldos arriba de los 8 mil 615 pesos mensuales. Estos no tuvieron un impacto directo por el ajuste que se realizó desde el 2022.
¡Comenzamos el año conscientes del momento histórico que vivimos! Por un Año Nuevo lleno de alegría y fraternidad. ❤️
No olvidar👇🏼
A partir de hoy, 1º de enero de 2024, el #SalarioMínimo será de 375 pesos en la Frontera Norte y 248.9 en el resto del país, 20% más que el año… pic.twitter.com/ZU5ZHeJNSH
— Luisa Alcalde (@LuisaAlcalde) January 2, 2024
Actualmente menos del 15 por ciento de la población trabajadora está sindicalizada. Esto complica que se puedan negociar mejores salarios, además de que “el 80 por ciento de los contratos colectivos de trabajo siguen siendo contratos de protección, con remuneraciones no precisamente dignas”.
Así lo explicó Andrés Peñaloza, presidente de la consultoría Bialii, para El Economista. El especialista también dijo que ni las empresas, ni el Estado, ni los sindicatos “pueden seguir en la simulación” de sólo elevar los salarios mínimos.
“Tenemos la misma dignidad. Por lo tanto, la empresa debe considerarlas como el centro de la misma para asegurar que esto se cumpla”, dijo por su parte Terrazas para el medio de economía.
“El salario no sólo debe alcanzar para comer, la gente no sólo vivimos para eso. Deben poder ir al cine, salir a comer o pasear, tener libros. No son lujos, es lo básico”, puntualizó.