Peso mexicano se desploma en medio de las elecciones en EU y el posible regreso de Trump

Analistas alertan que un regreso de Trump podría perjudicar a México por sus políticas proteccionistas y postura migratoria
Roberto Trejo Roberto Trejo Publicado el
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El peso mexicano ha registrado su peor nivel del año la noche de este martes, coincidiendo con las elecciones en Estados Unidos que definirán si la demócrata Kamala Harris o el republicano Donald Trump asumirán la presidencia.

A las 21:00 horas, el dólar estadounidense se cotizó en 20.67 pesos, según el indicador en tiempo real de Google. Esta cifra contrasta notablemente con los 20.11 pesos con los que cerró la moneda el lunes, reflejando la incertidumbre que atraviesan los mercados.

El peso alcanzó su nivel más bajo del año, cotizándose a 20.67 pesos por dólar. Foto: Google

¿Cómo van las elecciones en EU?

Hasta el último reporte de la agencia AP, emitido a las 21:00 horas, el expresidente Trump lideraba la contienda electoral con 198 votos del Colegio Electoral, mientras que Harris acumulaba 109. Sin embargo, faltan aún por definirse varios estados clave que podrían dar un giro a la contienda.

La carrera por alcanzar los 270 votos, necesarios para ganar, es feroz, y los expertos advierten que, dependiendo de lo cerrada que sea la elección, el resultado final podría no conocerse esta misma noche.

Se necesitan 270 votos para ganar la presidencia. Foto: AP

México teme posible regreso de Trump

Según analistas, la posible victoria de Trump genera un clima de inquietud en México, dado su enfoque proteccionista y su postura de línea dura en temas migratorios y comerciales.

Su historial incluye negociaciones tensas, como en 2019, cuando presionó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador para desplegar agentes de la Guardia Nacional en la frontera sur mexicana, bajo amenaza de imponer aranceles.

Para este 2024, Trump ha propuesto medidas que muchos ven como alarmantes: aranceles de hasta un 300% a los automóviles fabricados en México, así como un impuesto a las importaciones, para dar prioridad a las manufacturas en Estados Unidos.

Estas políticas son vistas como una amenaza para la industria mexicana y, de concretarse, podrían desencadenar un impacto severo en la economía del país.

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