Pánico bancario, historia repetida
Tendemos a tratar las crisis financieras con una actitud de singularidad. La realidad es que éstas han existido desde hace cientos de años.
Una artículo académico de investigadoras de la Reserva Federal de Nueva York y la Universidad de Boston, publicado por el Buró Nacional de Investigación Económica, nos recuerda de ello.
Las autoras analizan las circunstancias excepcionales que llevaron al pánico bancario que se originó en Estados Unidos en 1907.
Eduardo FloresTendemos a tratar las crisis financieras con una actitud de singularidad. La realidad es que éstas han existido desde hace cientos de años.
Una artículo académico de investigadoras de la Reserva Federal de Nueva York y la Universidad de Boston, publicado por el Buró Nacional de Investigación Económica, nos recuerda de ello.
Las autoras analizan las circunstancias excepcionales que llevaron al pánico bancario que se originó en Estados Unidos en 1907.
Además de que se notan similitudes con la última crisis, nos ofrece una explicación parcial sobre los efectos de éstas en empresas que no están relacionadas al sistema financiero.
Efecto de bancos sin regulaciones
En 1907, la proliferación de bancos con menores regulaciones, como ocurrió recientemente, fue una condición necesaria para la crisis.
Estos bancos no estaban regulados por leyes bancarias por ser “instituciones de confianza” que se encargaban principalmente de proveer liquidez a empresas grandes.
Como sus homólogos más modernos, y para generar mayores ganancias, estos bancos tenían pocas reservas y estaban fuertemente apalancados.
Estas instituciones dependían de la reputación de sus principales directores, quienes algunas veces eran miembros de juntas directivas de grandes empresas.
Todo comenzó cuando un negocio especulativo en minas de oro le salió mal a un alto directivo de un banco. El público, preocupado por las probables asociaciones de esa persona con quienes dirigían su banco, corrió por su dinero, dejando a las instituciones en quiebra.
Posteriormente, y como hoy se hace con la última crisis financiera, banqueros fueron puestos en juicio y agrias notas contra la codicia de Wall Street se publicaron en los diarios locales.
La conclusión de la investigación, también puede ser importante para estos días turbios.
Según las autoras, a diferencia de las empresas financieras, las empresas de la economía real sufrieron por años.
Lo anterior porque un golpe a la credibilidad del sistema financiero redujo los préstamos a pequeños empresarios, que son más propensos a retirar su dinero ante rumores o expectativas, y por lo tanto representan más riesgo para las instituciones financieras.