Norte de México sigue destacando en inversión extranjera
Las empresas ubicadas al norte del país han sido las mayores beneficiarias por el aumento de la demanda de productos de Estados Unidos o la relocalización de empresas
María Fernanda NavarroPese a que el Gobierno de la Cuarta Transformación ha querido dar prioridad al desarrollo de obras de infraestructura y enfocar inversión extranjera en el sur y sureste del país, los estados del norte continúan siendo los más avanzados en esta materia.
Por ejemplo, durante el periodo de abril a julio de 2022 se registró un impulso a la actividad manufacturera de la región norte del país producto de la relocalización de líneas de producción de empresas extranjeras en México con el objetivo de abastecer al mercado de Estados Unidos.
De acuerdo con información del Banco de México (Banxico), subsectores como los enfocados en maquinaria y equipo, automotriz y fabricación de productos metálicos, así como fabricación de camiones pesados de la región norte del país, se han visto beneficiados ya sea por el aumento de la demanda por parte de productos de Estados Unidos o el incremento de la Inversión Extranjera Directa (IED) que ocurre en el marco del nearshoring.
“Sí se ha observado la llegada de más empresas extranjeras a México que buscan beneficiarse de la cercanía con Estados Unidos. Esto se debe principalmente a las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos y a las reglas de origen del T-MEC, que fueron mencionados por 49.3 y 49 por ciento de las empresas entrevistadas respectivamente”, señala el Reporte sobre las Economías Regionales abriljunio 2022 que lleva a cabo una encuesta mensual para indagar en la actividad económica de las empresas.
El reporte apunta que 33.3 por ciento de las empresas consideran a la pandemia de COVID-19 uno de los factores que puede atribuirse a la llegada de más empresas extranjeras a México.
De las empresas encuestadas, las más beneficiadas por la Inversión Extranjera Directa (IED) son las ubicadas al norte del país con hasta 6.5 por ciento, frente a las 3.2 por ciento que se ubican en el centro-norte del país y dos por ciento del centro y uno por ciento de las que han recibido estos beneficios en el sur.
En el caso de las empresas que han trasladado su operación a México o aquellas que son nuevas y eligieron al país para asentarse, 5.6 por ciento lo hicieron en el norte, 4.5 por ciento en el centro-norte, 4.7 en el centro del país y 2.3 por ciento en el sur.
Datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) apuntan que México tiene el potencial más alto para beneficiarse del proceso del nearshoring que podría generar potenciales ganancias hasta por 35 mil millones de dólares, equivalente a 2.66 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), derivado de nuevas exportaciones de mercancías.
Impulso al sur con inversión extranjera y relocalización
Este año el Gobierno federal ha señalado sus intenciones de hacer de México un protagonista de la transición de la globalización a la regionalización de las cadenas globales de valor, aunque gran parte de sus esfuerzos para lograrlo se han enfocado en el sur y sureste del país, con el objetivo de que sean estás regiones las que aprovechen la relocalización de empresas, proceso también conocido como nearshoring.
Por ejemplo, en agosto de este año, la actual administración anunció el pasado seis de julio que el BID otorgará una línea de crédito de 200 millones de dólares para facilitar la relocalización de las empresas extranjeras en cualquier parte de México aunque se dará prioridad a la región del Istmo Tehuantepec, en donde se construye un corredor interoceánico.
Además de este apoyo, la Secretaría de Hacienda prepara incentivos fiscales para las empresas que se relocalicen en la región del sur y sureste del país, a través de sus actividades comerciales, el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA); así como inversiones por más de 20 mil millones de pesos.
Cabe destacar que los estados del sur y sureste mexicano siguen siendo los menos competitivos del país, en gran medida debido a las condiciones y oportunidades laborales que se presentan en estos, de acuerdo con el Índice de Competitividad Estatal (ICE) 2022.
El reporte elaborado por el Instituto para la Competitividad Mexicana (IMCO) posiciona a Guerrero, Oaxaca y Chiapas en los últimos tres lugares de la tabla, mientras que Ciudad de México, Nuevo León y Coahuila acaparan los primeros lugares. El estudio se enfoca en medir la capacidad de los estados para generar, atraer, retener talento e inversiones.
En el sureste se concentran los obstáculos más significativos para el desarrollo , particularmente la prevalencia de altos niveles de pobreza, bajo grado de escolaridad y poco acceso a la salud.
Además el índice no sólo se enfoca en aspectos económicos de las entidades, sino que evalúa elementos como el entorno de seguridad pública y jurídica, el medio ambiente, el sistema político, los gobiernos, el desempeño de los trabajadores y empleadores, las relaciones internacionales y la innovación.
Te puede interesar: Relocalización de producción de semiconductores, ‘cambio de chip’ en Norteamérica