Negro futuro
Después de haber caído casi 60 por ciento desde junio del año pasado a mediados de enero de este año, los precios petroleros parecen estarse recuperando.
En las últimas tres semanas, el precio de la mezcla de referencia internacional, el barril Brent, se ha levantado aproximadamente 18 por ciento. En el mismo periodo el precio de la Mezcla Mexicana se incrementó casi 20 por ciento, mientras que el del WTI, de referencia estadounidense, vio un aumento de 11 por ciento.
Rolando Hinojosahttps://www.youtube.com/watch?v=J5s4t-ZIbno
Después de haber caído casi 60 por ciento desde junio del año pasado a mediados de enero de este año, los precios petroleros parecen estarse recuperando.
En las últimas tres semanas, el precio de la mezcla de referencia internacional, el barril Brent, se ha levantado aproximadamente 18 por ciento. En el mismo periodo el precio de la Mezcla Mexicana se incrementó casi 20 por ciento, mientras que el del WTI, de referencia estadounidense, vio un aumento de 11 por ciento.
Sin embargo, Citigroup advierte que este repunte no durará y que los precios volverán a caer antes de levantarse hasta un nivel de 75 dólares por barril en el último trimestre del año.
Bloomberg reporta que Citi redujo por segunda vez en lo que va del año su pronóstico de precio promedio anual del Brent, que ya es de 54 dólares por barril.
Al mismo tiempo, el reporte del banco estima que el precio del WTI, que actualmente ronda los 50 dólares por barril, podría caer a 20 dólares y mantenerse en ese rango “por un rato”.
Cabe recordar que un reporte de Citigroup de abril del año pasado fue uno de los primeros en pronosticar la caída petrolera, aunque en ese entonces el peor escenario previsto era uno con precios de 65 dólares por barril, mismo que ya fue rebasado por la realidad.
Y aunque casi todas las caídas significativas en los precios petroleros desde 1984 han sido seguidas por una veloz recuperación, en esta ocasión hay nuevos factores que ponen esto en duda.
Edward Morse, director global de investigación de commodities en Citigroup, señala que a pesar de los recortes en inversión de exploración y producción de hidrocarburos que han impulsado el alza de precios de las últimas semanas, la producción petrolera global sigue en aumento, y probablemente no caerá sino hasta el tercer trimestre del año.
El fin de la OPEP
En el pasado, los países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) han recortado su producción para mantener precios altos. Pero ahora no sólo se han rehusado a hacer esto sino que han incrementado su producción y recortado precios.
Bajo el liderazgo de Arabia Saudita, estos países están buscando recuperar la participación de mercado que han perdido en los últimos años frente a productores de yacimientos shale (de esquisto) en países como Estados Unidos.
Mientras que la mayoría de los productores shale necesitan precios por encima de los 50 dólares por barril para mantenerse rentables, los costos de inversión y extracción en los países productores del Golfo Pérsico son de aproximadamente 10 dólares por barril.
Por lo tanto, si no recortan la producción y mantienen precios bajos, los países de la OPEP esperan volver incosteables y sacar del mercado a sus rivales, recuperando su dominio.
Sin embargo, esta estrategia no viene libre de costos dolorosos para la OPEP, ya que aunque el nivel actual de precios sigue siendo rentable para sus productores, se encuentra muy por debajo del precio fijado para balancear sus finanzas públicas.
Morse señala que si el actual escenario de precios se mantiene, estos países perderán 445 mil millones de dólares en ingresos fiscales este año, lo cual representaría un nivel de recaudación 50 por ciento más bajo que el del 2012.
Demanda débil
A esta sobreoferta en países como Estados Unidos, Arabia Saudita, Rusia y Brasil hay que agregar una demanda global débil que sigue sin mostrar señas de recuperación.
La OPEP estima que la demanda petrolera crecerá sólo 1.3 por ciento este año a comparación del 2014, alcanzando un nivel de 92.32 millones de barriles diarios.
Aún este incremento, mayor al registrado en 2014, se ve optimista entre recortes en los pronósticos de crecimiento económico arrojados por organizaciones como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
Estos recortes resultan más preocupantes al considerar que en teoría la caída en los precios petroleros debería dar un estímulo al crecimiento, resultando en menores costos para las empresas y en más ingresos disponibles para el consumo de los hogares.
Pero con Europa a la orilla de una crisis deflacionaria, severas recesiones en países como Rusia y Venezuela, y menor crecimiento en los países emergentes, nada indica que la demanda vaya a dar un repunte en el corto plazo.
Citigroup fue uno de los primeros grandes analistas en afirmar que los precios del petróleo caerían de manera considerable, aunque la realidad superó por mucho sus pronósticos más bajos.