Los millennials han transformado hasta la forma de lavar y planchar. Satisfacer a esta generación no es fácil y menos cuando se trata de una industria tradicional que lleva años existiendo: las tintorerías.
En un intento por cautivar a esta población, las empresas del segmento comienzan a migrar hacia plataformas digitales donde los usuarios solicitan la recolección de prendas en su domicilio, pagan en línea y aguardan un lapso de hasta 48 horas para la entrega.
“Las tintorerías siguen siendo un negocio rentable, pero ha cambiado derivado de los hábitos de consumo de los millennials y la estrecha relación que tienen con la tecnología”, dice Raúl Jiménez, director de Franquicias de Tintorerías Max y de Tin2Go.
La industria nacional de tintorerías y lavanderías está conformada por más de 30 mil establecimientos regulados, que emplean a 66 mil personas, según las últimas cifras disponibles en el Inegi.
En cuanto a la penetración, Ciudad de México concentra el mayor número de establecimientos, con 18.6 por ciento del total; Estado de México, con 16.7; Jalisco, con 7.4, mientras que Veracruz y Puebla, con 7.4 y 4.8, respectivamente.
El director de Franquicias de Tintorerías Max comparte que la digitalización le permite a la industria crecer fuera del mundo físico, donde enfrentan desafíos.
“Uno de los mayores retos es encontrar locales comerciales idóneos para establecer una sucursal, sobre todo, en las grandes urbes. Las rentas por metro cuadrado han ido escalando de manera importante y este es uno de los aspectos que más cuidamos”, añade Jiménez.
Otro factor son los precios de energéticos que desde hace meses van al alza. Esto perjudica a la industria, ya que las máquinas que se utilizan requieren de electricidad para funcionar, situación que ha encarecido el costo de producción.
Por ello, el internet les permiten atender a un mayor número de clientes, sin la necesidad de invertir en más infraestructura.
El sector de las tintorerías es un negocio de primera necesidad que atiende al 85 por ciento de la población mexicana en el nivel socio económico medio, de acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria de Lavanderías (Canalava).
Cada día, un mexicano promedio genera de tres a cinco prendas sucias, en tanto que una familia de cuatro integrantes de 22 a 28 kilogramos a la semana.
Las plataformas enfocadas en la atención a las nuevas generaciones no sólo han sabido aprovechar el servicio básico de tintorería, su apuesta también abarca servicios de sastrería, limpieza de salas, alfombras, sábanas, cortinas, toallas, manteles, entre otros.
Raúl Jiménez asegura que los usuarios de Tin2Go son, en su mayoría, millennials, pero quieren ampliar el rango para permitir la entrada de los jóvenes que vienen detrás de ellos.
“Nos interesa la Generación Z porque ellos serán los próximos consumidores de cualquier servicio relacionado con el cuidado y limpieza de prendas”.