Dos velocidades
Aún con las amenazas de Donald Trump, de castigar las importaciones de autos desde México, con un impuesto, las ventas de vehículos fabricados en el mercado nacional hacia Estados Unidos registran un avance positivo; lo cual contrasta con el desempeño del mercado automotor estadounidense, que no repunta.
Los temores no han desaparecido en la industria automotriz de México debido a lo incierto en el rumbo de la renegociación del TLCAN y los objetivos que ya definió Estados Unidos en las conversaciones.
Lourdes González
Aún con las amenazas de Donald Trump, de castigar las importaciones de autos desde México, con un impuesto, las ventas de vehículos fabricados en el mercado nacional hacia Estados Unidos registran un avance positivo; lo cual contrasta con el desempeño del mercado automotor estadounidense, que no repunta.
Los temores no han desaparecido en la industria automotriz de México debido a lo incierto en el rumbo de la renegociación del TLCAN y los objetivos que ya definió Estados Unidos en las conversaciones.
El interés de Trump de bajar el déficit comercial con México, a través de un incremento de las reglas de origen implicaría que países asiáticos respondan en forma negativa a esa medida, lo cual tendría consecuencias en su inversión en México.
Mientras esto ocurre, las ventas de autos en Estados Unidos no revierten su tendencia bajista, pese al menor desempleo, que la confianza de los consumidores es alta, y que los precios de los combustibles y tasas de interés siguen decreciendo.
Sin embargo, para algunos ejecutivos y analistas del sector automotor todavía no hay signos para entrar en pánico. Las ventas siguen fuertes, y no se espera ninguna especie de desplome.
Además, los consumidores estadounidenses siguen comprando camionetas y SUV´s con opciones de altos precios, lo cual ayudaría a las ganancias, al menos en Detroit.
La caída en ventas obedece, en gran parte, a que las personas que retrasaron la decisión de comprar vehículos después de la crisis de 2009 han comprado nuevas unidades, opinó Jessica Caldwell, directora de análisis de Edmunds.com.
“Estamos en el punto en el que no tenemos un estímulo que provenga de ello”, añadió.
Impacto a grandes automotrices
Los principales fabricantes de automóviles en Estados Unidos registraron una disminución de las ventas en julio de este año, a las agencias de alquiler de vehículos, luego de que el ritmo de ventas de autos y camionetas en ese mercado cayó por quinto mes consecutivo, según la agencia Reuters.
Las ventas de automóviles y camionetas ligeras en el mercado estadounidense llegó en julio pasado a 16.73 millones de unidades, frente a los 17.8 millones vendidas en el mismo periodo del año anterior, de acuerdo a Autodata Corp, que realiza un seguimiento del desempeño de la industria.
Este resultado negativo provocó que los inversionistas se desprendieran de sus acciones en automotrices de Detroit de esa forma, los títulos de General Motors perdieron 3.3 por ciento, mientras que los de Ford cayeron 2.4 por ciento.
Algunas de las grandes automotrices como GM, Ford, Fiat Chrysler, Nissan, Hyundai Motor disminuyeron en forma repentina sus ventas a las agencias de alquiler de autos en julio, en una estrategia de proteger sus utilidades por encima de los volúmenes de facturación.
Según el reporte que citó a ejecutivos de la industria, las automotrices han utilizado las ventas de bajos márgenes a firmas de alquiler de autos para evitar el cierre de fábricas. Sin embargo, ahora existen acuerdos laborales más flexibles y por eso las automotrices cambiaron de medida para demandar precios más altos.
Por su parte, las firmas de alquiler de autos en Estados Unidos como por ejemplo, Hertz Global Holdings, Avis Budget Car Rental están reestructurando sus flotas porque el valor de las unidades que revenden se reduce, al mismo tiempo afrontan la entrada al negocio de transporte de nuevos jugadores como Uber.
Otra factor que prende los focos rojos en los fabricantes automotrices estadounidenses es la caída de cuatro por ciento de la venta combinada de grandes camionetas; además, la venta de vehículos deportivos utilitarios bajaron un 20 por ciento. La serie F de Ford registró un alza de seis por ciento, lo que representó un mejor desempeño en base interanual entre los modelos de camionetas de gran tamaño.
Crecen autos mexicanos en EU
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (Amia) reportó en el primer semestre del año una producción de autos en México que representó una cifra récord histórica, de un millón 884 mil 315 unidades, para un alza de 12.6 por ciento.
Mientras que la exportación también alcanzó una cifra récord de un millón 513 mil 334 automóviles al mundo, para un alza de 14 por ciento de enero a junio de 2017.
Durante el mes de junio reportó un crecimiento de las exportaciones de 12 por ciento.
Estados Unidos representó el principal destino de las exportaciones con una participación de 76.8 por ciento de los envíos de México al exterior, para un crecimiento de 15.6 por ciento, en el primer semestre del año.
Eduardo Solís, presidente de la AMIA aseguró, que las exportaciones en junio a Estados Unidos crecieron 15.9 por ciento para una participación de 77.8 por ciento, que son los niveles más altos en participación hacia el vecino país.
Cerca de 80 por ciento de la producción de vehículos ligeros en México se destina a la exportación y de las unidades que el país vende en el extranjero, en lo que va del año, 85.3 por ciento se destinan a la región del TLCAN, por ello la relevancia de estos mercados para la fabricación mexicana, agregó Solís.
Las ventas de autos en Estados Unidos registran una desaceleración, en donde las marcas como Ford, General Motors, FCA comercializaron menos unidades, en tanto las asiáticas como Toyota, Honda y Kia siguen en ascenso.
Sin embargo, la Amia reportó que de cada 100 autos que se vendieron en Estados Unidos, 15 fueron mexicanos, durante junio pasado, frente a la incertidumbre que prevalece por las amenazas del presidente Donald Trump.
El vehículo más vendido en Estados Unidos fue la Silverado 2500 de GM, con 122 mil 493 unidades, y 10 por ciento de participación.