Megafusiones en peligro
Tras un año en el cual el valor de las fusiones y adquisiciones corporativas tocó un récord histórico de 3.6 billones de dólares, el 2016 arrancó con frenos en este rubro.
La regulación más estricta en contra de las fusiones diseñadas para recortar impuestos puso fin a los planes de unión entre Pfizer y Allergan, los cuales hubiesen creado a la empresa farmacéutica más grande del mundo.
Ahora las autoridades estadounidenses están demandando a las empresas de servicios petroleros Halliburton y Baker Hughes, bloqueando su fusión por motivos de competencia económica.
Rolando Hinojosa
Tras un año en el cual el valor de las fusiones y adquisiciones corporativas tocó un récord histórico de 3.6 billones de dólares, el 2016 arrancó con frenos en este rubro.
La regulación más estricta en contra de las fusiones diseñadas para recortar impuestos puso fin a los planes de unión entre Pfizer y Allergan, los cuales hubiesen creado a la empresa farmacéutica más grande del mundo.
Ahora las autoridades estadounidenses están demandando a las empresas de servicios petroleros Halliburton y Baker Hughes, bloqueando su fusión por motivos de competencia económica.
¿Se toparán con un destino similar las hoteleras Marriott y Starwood, o las cerveceras AB InBev y SABMiller?
El primer trimestre del 2016 incluyó una caída interanual de 11 por ciento en el valor total de los acuerdos de fusiones y adquisiciones empresariales (F&A) alrededor del mundo, el cual registró un monto de 621.5 mil millones de dólares según datos de Bloomberg.
La razón de esta caída tiene que ver parcialmente con la volatilidad e incertidumbre con la que los mercados financieros arrancaron el año. Esta turbulencia reduce el apetito de riesgo de las empresas y sus inversionistas, lo cual afecta negativamente a la actividad de F&A.
Pero otro factor que pesa en contra de la consolidación corporativa es el entorno regulatorio, ya sea por cuestiones fiscales o de competencia económica.
Dos ejemplos recientes de estos obstáculos son la difunta combinación entre Pfizer y Allergan y la fusión bloqueada de las empresas de servicios petroleros Halliburton y Baker Hughes.
Acuerdos sin frutos
La fusión acordada entre la estadounidense Pfizer y la irlandesa Allergan, valuada en aproximadamente 160 mil millones de dólares, hubiese resultado en la creación de la empresa farmacéutica más grande del mundo.
Sin embargo, esta semana ambas empresas anunciaron que no procederán con la fusión debido a que nueva regulación por parte del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos remueve la principal ventaja que atrajo a Pfizer: la posibilidad de cambiar su domicilio fiscal a Irlanda para reducir su carga impositiva.
Las autoridades estadounidenses también están bloqueando la fusión entre Halliburton y Baker Hughes, respectivamente la segunda y tercera mayor empresa de servicios petroleros del mundo detrás de Schlumberger.
El Departamento de Justicia planea demandar a Halliburton para así bloquear la fusión entre ambas empresas, argumentando que sus planes reducirían injustamente la competencia económica en su sector.
Fusiones en riesgo
Los problemas de Halliburton y Baker Hughes, cuyos planes fueron anunciados desde noviembre del 2014, representan una advertencia para las cerveceras Anheuser-Busch InBev (AB InBev) y SABMiller.
La combinación de ambas empresas crearía la mayor cervecera del mundo, y esto levanta preocupaciones de preponderancia económica entre los reguladores de competencia.
A pesar de que ambas empresas han vendido parte de sus activos para complacer a las autoridades, la fusión se está topando con problemas en Sudáfrica, donde se están poniendo los planes de ambas empresas bajo la lupa.
Si las autoridades en Estados Unidos y Europa toman una postura similar, AB InBev y SABMiller podrían terminar enfrentando un prolongado y costoso proceso, tal y como le está ocurriendo a Halliburton y Baker Hughes.
Pero aún si las grandes empresas de Occidente están experimentando turbulencia en sus planes de F&A, los expertos señalan que alguien se ha mostrado dispuesto a tomar su lugar impulsando el mercado: China.
En el primer trimestre del año, empresas chinas han anunciado un total de 97 mil millones de dólares en adquisiciones extranjeras, casi rebasando su ritmo de compras de los últimos dos años.