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Cada vez es más difícil para los artistas vivir sólo de vender canciones, por lo que se ven obligados a diversificarse y comercializar su nombre como marca de diferentes maneras.
Desde crear su propia línea de ropa, hasta fundar empresas de capital emprendedor, los grupos encuentran formas de combatir la caída de ingresos que trajo consigo la era de la música digital.
Los nuevos servicios de streaming que permiten acceder a música de manera gratuita sin descuidar la remuneración para los autores no son suficientes. Estos son algunos de los ejemplos de diversificación musical más emblemáticos de la industria.
Creando expectativas
Odd Future, el grupo de rap alternativo que nació en el 2006 en Los Ángeles, produce su propia mercancía oficial y se encarga de venderla directamente a los fanáticos, por lo que elimina el costo de un intermediario.
También conocido como OFWGKTA (siglas de Odd Future Wolf Gang Kill Them All) se ha vuelto famoso tanto por sus canciones como el comportamiento polémico de sus integrantes, especialmente del rapero Tyler, The Creator.
El grupo sabe cómo aprovechar esta fama. En los lugares en dónde se va a presentar, Odd Future instala tiendas temporales que sólo abren por un día para vender sus productos. Las personas hacen filas durante horas para comprar los productos y la banda suele aprovechar la oportunidad para ir a conocer a sus más fieles seguidores en persona, con lo que se rompe la clásica venta de playeras genéricas en los conciertos.
De vuelta a la escuela
Desde sus inicios, Linkin Park se distinguió por comercializar su música directamente con seguidores a través de Internet.
Sin embargo, desde 1999 creó una empresa de innovación llamada Machine Shop ofrece servicios de marketing a otras bandas, productores de películas, cadenas de televisión y cualquier tipo de marca en general.
Pero con la llegada de la era digital, Machine Shop dejó de ser suficiente para la banda.
Los integrantes del grupo acudieron a la escuela de negocios de Harvard para asesorarse acerca de nuevas formas de diversificar su negocio.
Fue así que la banda fundó recientemente una firma de capital emprendedor con el objetivo de apoyar startups prometedoras. La empresa ya ha invertido en Robinhood, una aplicación para invertir en bolsa de manera sencilla, Lyft, un servicio para compartir auto y Blue Bottle, una productora de café artesanal.
Además, Linkin Park ha incursionado antes en la creación de videojuegos y contenidos audiovisuales en los que se aprecia su estilo.
El grupo afirma que todos estos nuevos negocios no afectan ni afectarán su producción musical, sin embargo, consideran que es necesario este tipo de diversificación si quieren sobrevivir como banda.
Hoy en día el grupo obtiene más ingresos de sus proyectos secundarios que de sus canciones.
Emporio de negocios
El rapero estadounidense Jay-Z es uno de los músicos que cuenta con una mayor gama de negocios fuera de la carrera artística.
Entre los negocios que ayudó a fundar o financiar se encuentra la comercializadora de música Roc Nation, la cadena de bares deportivos 40/40 Club, la marca de ropa que él mismo promociona constantemente Rocawear y la línea de perfumes y productos de belleza Carol’s Daughter.
Además, es uno de los dueños del equipo de básquetbol profesional New Jersey Nets que Forbes ha llegado a valuar en 269 millones de dólares. También se convirtió en la primera persona en contar con su línea de tenis Reebok sin ser un atleta profesional.
A todo esto se le debe agregar el toque de rey midas que tiene al momento de promocionar productos. Ha sido la cara de varias empresas e incluso ayudó a impulsar la carrera musical de varios artistas como su esposa Beyonce y Linkin Park.
La imagen perfecta
Además de contar con un gran éxito en la industria musical, que la ha llevado a cantar en el espectáculo de medio de tiempo del Súper Tazón y el evento de inauguración de la presidencia de Barack Obama, Beyonce es la cara de varias empresas.
Su nombre aparece en marcas de perfumes, productos de belleza y comerciales de refrescos de Pepsi. Existe un documental también de su vida que lleva el nombre de La vida no es más que un sueño.
De acuerdo con la revista Forbes, Beyonce es la trigésima segunda mujer más poderosa del mundo y estima que sus ingresos anuales ascienden hasta los 40 millones de dólares. Beyonce pasó de ser una estrella musical a un ícono de la cultura popular, activo que ha sabido explotar al máximo.
