Este lunes 25 de noviembre, la agencia calificadora HR Ratings se ha sumado a Moody’s y ha decidido cambiar la perspectiva de la calificación crediticia de México de “Estable” a “Negativa” en BBB+.
HR Ratings informó que el cambio en la perspectiva es resultado del deterioro en sus estimaciones sobre el crecimiento económico de México en 2024 y 2025, así como de su expectativa de una reducción más lenta del déficit fiscal para el siguiente año, “lo cual podría presionar la deuda neta como proporción del Producto Interno Bruto (PIB)”.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ha revelado que planea bajar el déficit fiscal de 5.9 por ciento del PIB a 3.9 por ciento.
HR Ratings refiere que la reducción en la expectativa de crecimiento para México es resultado del comportamiento negativo que ha mostrado la actividad industrial durante los últimos doce meses, especialmente por el menor dinamismo del sector de la construcción, además de una desaceleración del sector manufacturero y una menor demanda externa.
“Asimismo, el cambio de administración esperado en enero de 2025 en Estados Unidos podría llevar a un deterioro en la relación comercial con el principal socio comercial de México, y por lo tanto continuar afectando negativamente el desempeño del comportamiento económico”.
En este orden de ideas, proyectan que el PIB crecerá 1.4 por ciento en 2024 y 1.1 por ciento para el año entrante, subrayan que su estimación es menor a lo esperado por la Secretaría de Hacienda de 2.1 por ciento y 2.3 por ciento, respectivamente.
“La disminución en la expectativa del desempeño económico y una mayor depreciación del tipo de cambio, respecto al estimado en abril, llevarían al Saldo Histórico al cierre de 2024 a 52.24 por ciento del PIB, lo cual es mayor al esperado anteriormente en las proyecciones de HR Ratings de 50.76 por ciento”.
HR Ratings advierte sobre aranceles
Paralelamente, la calificadora advirtió que la incertidumbre provocada por el cambio en la presidencia de Estados Unidos con Donald Trump al frente conllevaría implicaciones negativas en la relación comercial entre ambos países.
“El riesgo de la introducción de nuevos o mayores aranceles a las importaciones de bienes producidos en México podría tener un impacto profundo en el sector industrial, aumentando la incertidumbre entre los inversionistas y podría incidir negativamente en los niveles de actividad económica y en el comportamiento del tipo de cambio”, sostiene en su comunicado.
Sumado a lo anterior, el endurecimiento a la política migratoria durante la siguiente administración podría complicar todavía más las relaciones con ese país.
Previamente al anuncio de la calificadora, Donald Trump publicó en sus redes sociales que impondrá un arancel de 25 por ciento a las exportaciones mexicanas el 20 de enero, el día que tomará el cargo de presidente.
Hacienda fija postura
Por otra parte, la SHCP emitió un comunicado en donde informa que, pese a la reducción de la perspectiva, México mantiene el grado de inversión con las ocho calificadoras que evalúan su deuda.
La secretaría explicó que el cambio no significa una rebaja en la calificación, solo representa un ajuste precautorio ante el balance de riesgos que ha realizado la agencia.
“La calificadora modificó su perspectiva debido a menores expectativas de crecimiento económico, así como a los desafíos en la consolidación fiscal y el entorno global. En ese sentido, consideramos que el panorama de crecimiento para México es positivo, dado que los choques de oferta han comenzado a disminuir y la producción industrial ha mostrado un mejor dinamismo desde la segunda mitad del año”, destacó Hacienda.