Nueve de las 10 jugadoras de fútbol mejor pagadas del mundo son de la selección oficial de Estados Unidos, un referente en el desarrollo de grupos femeniles. Foto: Especial

Fut femenil, mete gol económico y los datos de la Copa Mundial lo demuestran

La Copa Mundial de Femenil celebrada este año en Australia & Nueva Zelanda dejará un precedente de la creciente fuerza financiera de los equipos conformados por mujeres

En el verano de 1999, las más de 90 mil personas en el estadio Rose Bowl en Pasadena, California, que asistieron al partido final de la Copa Mundial de Futbol Femenil entre Estados Unidos y China, validaron que el deporte del balompié entre mujeres era un negocio rentable.

Desde entonces la FIFA, la organización encargada de “gobernar el fútbol” a nivel mundial, apostó por el desarrollo de los equipos conformados por mujeres. Pero el alcance de récords históricos en asistencia e ingresos para la Copa Mundial Femenil de este año es resultado del impulso, en gran medida de entes privados, que avanza a contracorriente y salta las barreras de la misoginia en el deporte.

“Lo que vemos desde el mundial pasado (Francia 2019) con récords de audiencias es la consecuencia de 25 años de un trabajo mediático y de mercado encabezado sí por la FIFA y acelerado por cada región y ahí es donde se dan las diferencias, hay países que tienen más desarrollo porque han apoyado más el fútbol femenil que otros y justo en este mundial se visibilizan los países potencias (en fútbol) que nos muestran el más alto nivel al que se puede llegar en el futbol femenil”, explica Adrianelly Hernández, especialista en periodismo deportivo con perspectiva de género.

Datos de la Federation Internationale de Football Association (FIFA) apuntan a que con 48 juegos contabilizados, asistieron un millón 222 mil 839 fans a los estadios en los que tuvo lugar la Copa Mundial de Australia & Nueva Zelanda 2023, esto representa 29 por ciento más público que el registrado en 48 juegos de la Copa que tuvo lugar en Francia en 2019.

Los índices de espectadores en este mundial también son “abrumadoramente positivos” señala la FIFA, tan sólo en Australia el último partido de la fase de grupos entre el equipo femenil de ese país y las representantes de Canadá alcanzó 2.42 millones de espectadores. En tanto que el tráfico digital también superó al evento de Francia en 2019, toda vez que cada día que duró la Copa en Australia y Nueva Zelanda 2.4 millones de usuarios interactuaron con los canales digitales de la FIFA.

Además, hasta la primera quincena de agosto el valor total del patrocinio de marcas deportivas como Adidas, Nike y otros retailers más chicos como DICK’S Sporting Goods y Fanatics a grupos femeniles ascendió a 349 millones para este año.

Estos datos demuestran el crecimiento del fútbol femenil como un negocio lucrativo, un argumento que en muchas ocasiones se utilizó para justificar la falta de apoyo a las organizaciones femeniles en diversos países.

“Ya está demostrado con casos exitosos que el futbol femenil puede ser un buen negocio, una actividad de lucro, pero hay que creer en él, esto implica inversión, que cuando inicias un proyecto de futbol femenil, como toda inversión pues va ser complicado; pero si se arma un emprendimiento fuerte y además va a haber una retribución en cierto periodo, pero se tiene que hacer un plan adecuado”, explica la periodista.

Hernández pone como ejemplo de este desarrollo la selección nacional de fútbol femenil de Estados Unidos, que desde 2016 ya generaba más ganancias que el equipo masculino. Este éxito financiero se ha reflejado en el ingreso de las jugadoras del equipo estadounidense, de hecho, nueve de las 10 jugadoras mejor pagadas del mundo son de ese equipo, Alex Morgan y Megan Rapinoe tienen ganancias de 7.1 y 7 millones de dólares anuales, de acuerdo con cálculos de Forbes.

“¿Por qué se convirtió en un hito mediático? pues porque las jugadoras en el Mundial del 99 que fue en Estados Unidos hacían eventos de regalar boletos, las jugadoras promocionaban su propio mundial, es un proceso en el que hay que meterle energía, una campaña bien armada de posicionamiento, comunicación y que en cierto tiempo obtengas resultados. En 2019 la camiseta más vendida de Nike fue de la selección femenil de Estados Unidos, entre equipos de hombres y mujeres, pero pasaron más de 20 años, o sea cuesta llegar ahí pero si se puede convertir en un producto que sea lucrativo”, explica la periodista.

Sueldos para jugadoras profesionales

Los ingresos de las jugadoras se han convertido en el elemento más visible del incipiente negocio del fútbol femenil. De acuerdo con un análisis de CNN hasta 2023 las jugadoras ganan 25 centavos por cada dólar que recibieron los hombres en su Copa Mundial celebrada en Qatar el año pasado.

Para este año, la Fifa presentó un “nuevo modelo de distribución económica” para las federaciones que participaron en la Copa Mundial Femenina de la FIFA que también incluía fondos para remunerar a las jugadoras. El objetivo de este nuevo modelo era que las federaciones participantes percibieran compensaciones récord para fomentar el desarrollo del fútbol en sus respectivos países.

La remuneración para las federaciones van desde el millón 560 mil dólares hasta los cuatro millones 290 mil dólares, en tanto que a las jugadoras se les entregará de 30 mil a 270 mil dólares por su participación dependiendo el avance que hayan tenido en la justa deportiva.