El drama no acaba

Después de seis meses de tensas y amargas negociaciones, el gobierno griego alcanzó un acuerdo con sus acreedores durante el fin de semana. 

De proceder el acuerdo, Grecia obtendría 12 mil millones de euros (mmde) en financiamiento a corto plazo para cubrir sus obligaciones durante julio y agosto y así estabilizar su sistema financiero, además de negociaciones sobre un tercer paquete de rescate económico de hasta 86 mmde.

Rolando Hinojosa Rolando Hinojosa Publicado el
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50,000
millones de euros en activos públicos griegos tendrían que ser vendidos en los próximos años para crear un fondo dedicado a recapitalizar los bancos de Grecia, pagar la deuda del país, e invertir en su economía
“Evitamos los planes más extremos de las fuerzas conservadoras más extremas de la Unión Europea. Evitamos un plan que causaría una crisis crediticia y el colapso del sistema financiero, un plan que había sido preparado con gran detalle”
Alexis TsiprasPrimer ministro de Grecia
https://www.youtube.com/watch?v=7MaZYnoIufc

Después de seis meses de tensas y amargas negociaciones, el gobierno griego alcanzó un acuerdo con sus acreedores durante el fin de semana. 

De proceder el acuerdo, Grecia obtendría 12 mil millones de euros (mmde) en financiamiento a corto plazo para cubrir sus obligaciones durante julio y agosto y así estabilizar su sistema financiero, además de negociaciones sobre un tercer paquete de rescate económico de hasta 86 mmde.

Ayer por la mañana, después de una cumbre de líderes europeos que duró 17 horas, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, dijo que el acuerdo alcanzado evitaría “un colapso del sistema financiero” de Grecia, y mantendría al país dentro de la eurozona.

Tsipras caracterizó el acuerdo como un triunfo, diciendo que “evitamos los planes más extremos de las fuerzas conservadoras más extremas de la Unión Europea. Evitamos un plan que causaría una crisis crediticia y el colapso del sistema financiero, un plan que había sido preparado con gran detalle”.

Pero el drama griego aún no termina, ya que una combinación de tensiones políticas, condiciones de austeridad aún más onerosas que las de acuerdos anteriores, y un apretado calendario legislativo aún podrían descarrilar los planes de Europa.

Acuerdo oneroso

De entrada, los acreedores demandaron que el parlamento de Grecia tiene que aprobar, antes del miércoles, alzas de impuestos y recortes de pensiones como los que fueron rechazados en el referéndum griego del 05 de julio.

Además de esto, el gobierno griego debe vender 50 mmde de sus activos y colocar este dinero en un fondo que será supervisado por sus acreedores (aunque el control se mantendrá en manos de las autoridades helénicas). 

La mitad de este monto sería utilizado para recapitalizar los bancos griegos, con un cuarto siendo utilizado para pagar deuda y el resto siendo destinado a inversiones que reactiven el crecimiento económico.

Aún si Tsipras logra la aprobación de las medidas demandadas, esto representaría una contradicción del “fin a la austeridad” y “regreso a la dignidad” prometidos por su gobierno al ser elegidos. Dicho cambio de curso probablemente resultaría en la pérdida de apoyo por parte de su partido, la disolución de su gobierno, y una llamada a nuevas elecciones.

Es por esto que aunque la recepción del acuerdo en los mercados ha sido positiva, expertos y analistas advierten que aún queda tramo por recorrer antes de que la estabilidad vuelva a la eurozona.

División interna

Syriza, el partido de izquierda radical de Tsipras, mantiene una pluralidad de 149 de los 300 escaños del parlamento griego, y mantiene su gobierno de coalición con los 13 escaños del partido Griegos Independientes.

Pero el acuerdo alcanzado con los acreedores no pareció complacer a los compañeros de coalición de Syriza, ya que Panos Kammenos, el líder de Griegos Independientes, dijo el domingo que “ya fue suficiente” de negociaciones. Esto levanta la posibilidad de que su partido abandone al gobierno de Tsipras.

Y aún dentro de Syriza existen fuertes divisiones. 17 de sus miembros parlamentarios votaron en contra del acuerdo obtenido, y 15 más votaron a su favor a pesar de que indicaron que rechazarían las medidas necesarias para implementarlo.

Cronología del acuerdo

La tragedia griega lleva años desarrollándose en el escenario internacional. Desde el ingreso del país a la Unión Europea a base de mentiras, hasta los múltiples rescates financieros, estos son los puntos claves del drama:

Enero 2001

Miembro del euro 

Grecia entra a la Unión Europea después de aprobar los requisitos financieros que exigen a los países miembros, entre otras cosas, un déficit presupuestario menor al 3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Noviembre 2004

La mentira griega 

Los griegos revela que, con la ayuda del banco Golman Sachs, el país mintió acerca de sus finanzas públicas para entrar al euro, el encubrimiento siguió hasta el 2009 cuando admitieron un déficit de 15.4 por ciento.

Febrero 1 2007

El golpe de la crisis 

Los efectos de la crisis hipotecaria que inició en los Estados Unidos comienzan a hacer estragos alrededor del mundo. El costo de los préstamos incrementa y Grecia deja de ser capaz de manejar su deuda.

Mayo 2 2012

Primer rescate 

Para evitar que Grecia caiga en un incumplimiento de pagos, el Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea otorgan 110 mil millones de euros a cambio de un paquete de reformas para reducir el gasto público.

Febrero 21 2012

Segundo rescate 

La Unión Europea aprueba otro préstamo por 130 mil millones de euros y un recorte del 53.5 por ciento de la deuda para tenedores de bonos privados a cambio de reducir de 160 a 120.5 por ciento la relación de PIB-Deuda

Enero 25 2015

Anti-austeridad 

El partido radical de izquierda Syriza, caracterizado por su rechazo a las reformas de austeridad impuestas por los acreedores de Grecia, llega al poder como muestra del creciente descontento popular.

Julio 12 2015

Nuevo rescate

Después de meses de tensión y negociaciones fallidas, el gobierno griego llegó a un acuerdo con sus acreedores para evitar un default y mantener al país en la Unión Europea a cambio de severas medidas de austeridad.

 

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