El comercio electrónico en el país participa, como nunca, en el Producto Interno Bruto

En medio de un mercado con retos importantes por resolver, la venta en línea de bienes y servicios en el país ha registrado la mayor aportación a la riqueza del país de la que se tenga registro
Gabriel Nava Gabriel Nava Publicado el
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El comercio electrónico gana terreno en México al incrementar su participación en el Producto Interno Bruto nacional; en medio de pendientes por resolver para lograr una mayor penetración de mercado y hasta controversias con las principales empresas de la industria.

Comprar en línea se ha vuelto parte importante de los hábitos de consumo de millones de mexicanos, cuestión que ha resultado en que el comercio electrónico de bienes y servicios participe con 5.9  puntos porcentuales de toda la riqueza que se genera en el país, de acuerdo con la última estimación del Valor Agregado Bruto del Comercio Electrónico (VABCOEL), elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

A pesar de ser el porcentaje más elevado que ha alcanzado dicha actividad dentro de la economía nacional, existen diversos factores pendientes por atender para que el “e-commerce” como también se le conoce, pueda cobrar mayor relevancia en el escenario mexicano, ya que el estado actual de la industria plantea importantes obstáculos para los consumidores, explica a Reporte índigo Fiorentina García, cofundadora de Tec-Check Organización de Consumidores en Línea A.C.

“El comercio electrónico ofrece muchas ventajas para la población consumidora, como la fácil comparación de los precios, la mayor oferta de productos y el acceso a mercados transfronterizos; sin embargo, el caso mexicano está creciendo sin mejorar la protección de los consumidores digitales, lo que alerta porque no es una estrategia sostenible para que la tendencia de crecimiento continúe”, señala García.

Al respecto, el avance del e-commerce, que ha registrado una década de crecimiento ininterrumpido y que tomó un impulso mayor gracias a la pandemia, no se ha visto ajeno a cuestiones como la entrega inconclusa de paquetes, la venta de bienes y servicios distritos a los ofrecidos y hasta contracargos por consumo no reconocido vía internet, una afectación que ha registrado más de dos millones de solicitudes en 2023, según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).

Además, dentro del escenario nacional existen áreas de oportunidad que impiden que las ventas en línea en México consoliden al país como el mercado más atractivo de la región, tales como el proceso de inclusión financiera, el gran porcentaje de la economía en la esfera informal y hasta el aspecto logístico de las entregas, opina Mario Miranda, Co-CEO de Infracommerce para Latinoamérica.

De lo anterior que, dentro del territorio nacional no se cuente de manera generalizada con lo más avanzado en términos de las nuevas tendencias tecnológicas aplicadas al comercio electrónico, ya que “Cierto tipo de consumo que antes no abarcaba el comercio en línea hoy lo ha adoptado gracias a las expectativas de la rapidez en la entrega que han generado los consumidores, un desafío que las empresas tienen y que ya deben de estarlo trabajando y las que no, se van a quedar atrasadas, además del uso de la inteligencia artificial que se ha ido generalizando”, considera Miranda.

Concentración del comercio en línea, un mal que impide la mejora de los precios

Una muestra de los pendientes que tiene el comercio electrónico de bienes y servicios en el país para crear un mejor escenario es la concentración del mercado en pocos jugadores, situación que ha identificado la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) respecto al actuar dos empresas preponderantes, quienes detentan el 85 por ciento de las ventas y transacciones de comercio electrónico minorista, según el organismo regulatorio.

Un par de competidores “Cuentan con la capacidad para fijar precios;  de hecho, los vendedores que demandan su servicio presentan un escaso cambio o migración entre plataformas, lo que muestra dicha capacidad. Además, estos dos agentes económicos son quienes ofrecen los mayores precios y esquemas tarifarios complejos por el servicio de marketplace, sin que esto motive a los vendedores a trasladarse a otras plataformas”, señala Cofece.

En relación con lo anterior, la cofundadora de Tec-Check señala que a pesar de exponer la situación, las medidas que implementará Cofece ante la cuestión detectada resultan insuficientes para generar un ambiente que permita a más micro y pequeñas empresas comercializar en línea, lo que limita la oferta de productos y servicios, y que a su vez, impide una mejora en los precios.

México figura como el próximo gran mercado del e-commerce en la región

Más allá de los obstáculos y limitantes que conserva el mercado nacional de e-commerce, su volumen de ventas y aportación a la riqueza del país permiten considerarlo como uno de los mercados digitales emergentes que liderarán la región a corto plazo, advierte Mario Miranda.

“No está la misma situación en todos los países, hay dos naciones, que son Perú y México, que crecen en mayor medida respecto al comercio electrónico; el caso mexicano resalta ya que se ha visto beneficiado por el aumento del consumo digital, además de que lo ayuda su aspecto macroeconómico actual”, celebra el Co-CEO de Infracommerce para Latinoamérica por el estado del mercado digital de bienes y servicios en el país.

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