La edición más reciente de la ENOE refleja el resiliente panorama laboral del país de cara a las elecciones

El empleo en el país atraviesa por un momento caracterizado por una baja tasa de desocupación, pero con diversos factores por atender en términos de condiciones laborales; pendientes que tendrá que enfrentar con urgencia la próxima persona que lidere al país.

Suele pensarse que el mexicano “vota con la cartera” al fijar una postura política acorde a su condición económica, y parte de dicha decisión también atraviesa por el momento laboral que vive el electorado; una situación que en estos momentos envía señales cruzadas ante una gran cantidad de personas ocupadas, pero con grandes jornadas de trabajo, la ausencia de seguridad social y hasta la persistencia de bajos salarios.

Y es que, de cara el primer trimestre del año, 59.1 millones de personas se encontraban ocupadas, es decir, han realizado alguna actividad económica en el periodo de referencia; uno de los mayores registros que se haya alcanzado desde que se contabiliza a partir de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), destaca el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

“Se estima que la población ocupada alcanzó 59.1 millones de personas en el primer trimestre de 2024 (cifras originales), lo que significa un incremento de 629 mil de personas ocupadas en el lapso de un año; no obstante, se observa una ralentización, pues esta ocupación es inferior a la estimada en el cuatro trimestre de 2023 (59.4 millones), cuando se dio un incremento anual de más de un millón de personas”, puntualiza Julio Santaella, expresidente de Inegi.

Además, los datos de la ENOE para el primer trimestre de este año también resaltan una disminución de 78 mil personas en las personas que trabajan bajo condiciones de informalidad respecto al mismo lapso de 2023; un avance significativo si se considera que dicha categoría concentra “el trabajo no protegido en la actividad, el servicio doméstico remunerado no protegido, así como las y los trabajadores subordinados quienes, aunque trabajan para unidades económicas formales, lo hacen sin seguridad social”, explica el instituto encargado de la medición.

“Pensamos que el impulso actual que mantiene el empleo evitará un incremento relevante de la tasa de desempleo en dicho periodo. Estimamos que la estrechez del mercado laboral se reducirá gradualmente, aunque no se eliminaría por completo. Ante esto, los salarios seguirán avanzando a tasas elevadas en lo que queda de 2024”, estima sobre el mercado laboral nacional la dirección general adjunta de análisis económico y financiero de Banorte.

Claroscuros de las cifras de ocupación y empleo en México

A pesar de conservar una inercia positiva, el estado del empleo en México guarda en su interior una serie de factores que requieren ser atendidos de forma urgente ante el escenario de precariedad que vive el grueso de la clase trabajadora del país.

Por ejemplo, de los más de 59 millones de personas que se encontraron ocupadas en los tres primeros meses de 2024, 40.8 lo hicieron bajo la modalidad de personal subordinado y remunerado, quienes no suelen ganar más de dos salarios mínimos, lo que sería equivalente a menos de 15 mil pesos mensuales, expone la ENOE más reciente.

Incluso, de esos subordinados y remunerados, por lo menos 10 millones trabajan más de 48 horas a la semana, cuestión que da sentido a que México sea considerado como el segundo país en el que se destinan más horas al trabajo, solo por debajo de Colombia, de acuerdo con los cálculos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

“De acuerdo con el seguimiento realizado por ManpowerGroup a los datos del Inegi, los hombres que trabajan en la informalidad disminuyeron de 19 millones  29 mil 222 en el primer  trimestre de 2023 a 18 millones 752 mil 803 en el primer trimestre de este año, por el lado contrario, las mujeres aumentaron su presencia en la informalidad, pasando de 13 millones 178 mil 939 en 2023 a  13 millones  377 mil 448 mujeres informales en los tres primeros meses de 2024”, alerta la empresa de recursos humanos sobre el estado de la informalidad laboral en México desde una perspectiva de género.

La contienda electoral por la presidencia del país  y el mercado laboral

En el marco de la contienda electoral por la presidencia del país, millones de trabajadores se encuentran a la expectativa de que con el resultado de las elecciones, su situación laboral pueda mejorar a partir de la implementación de políticas que le prioricen.

Al momento, las personas que aspiran a liderar la nación han fijado postura al respecto; Claudia Sheinbaum señala que su “prosperidad compartida” implica un desarrollo empresarial que pueda compaginar con las necesidades de los que menos tienen, con lo que se contempla aumentos adicionales al salario mínimo; por otro lado, Xóchitl Gálvez ha destacado que, a partir de impulsar mejores condiciones para las empresas, se generará la riqueza necesaria para aumentar el bienestar de los mexicanos.

Por su parte Jorge Máynez ha expuesto que buscará impulsar al salario mínimo hasta los 10 mil pesos mensuales, al mismo tiempo que trabajará en reducir la jornada laboral a 40 horas semanales con dos días de descanso y en poder remunerar el trabajo doméstico, labor ignorada a lo largo de la historia del país.