Los desafíos que debe atender la economía mexicana según el último estudio de la OCDE

La economía mexicana tiene pendiente hacerle frente a la baja productividad y la desigualdad que impera en el país, por lo que estrategias en materia fiscal, la fortaleza institucional y el combate a la corrupción resultan vitales para provechar al máximo la coyuntura positiva por la que atraviesa la nación, de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.

Más allá de las turbulencias que se han experimentado a nivel global por las presiones inflacionarias persistentes, la política monetaria restrictiva que han implementado una gran cantidad de Bancos Centrales para contrarrestarlas y su reflejo en una desaceleración de la actividad económica que comienza a reflejarse al interior de diversas naciones, México sigue creciendo.

Lo anterior ha sido posible gracias a la demanda interna del país que se ha mostrado resiliente por el respaldo que tiene en un mercado laboral ajustado, el cual se ha dinamizado a partir de la inversión creciente, tanto en el ámbito público como privado; por lo que, para maximizar los beneficios que México puede adquirir en medio de un panorama económico complejo, es necesario que enfrente dos grandes pendientes históricos por resolver, la desigualdad y la baja productividad, diagnostica la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su más reciente “Estudio Económico de México”.

Al respecto, Mathias Cormann, Secretario General de la OCDE, señala que la economía de México ha vivido una transformación significativa en las últimas décadas, lo que ha generado un aumento de la riqueza producida y de la calidad de vida al interior del país, por lo que es imperativo profundizar en los aspectos que limitan a la nación para obtener un crecimiento más pronunciado.

“Podemos decir que el crecimiento en México está bien, pero necesitamos avanzar más, esto tiene que ver con enfrentar retos a través de reformas para la actividad del sector empresarial y diferentes medidas para la cuestión educativa y tener mejores resultados en el mercado laboral. Continuaremos trabajando con este país para poder aumentar la conectividad digital, simplificar las regulaciones y hacer un uso mayor de energías renovables”, explica Cormann, en la presentación del estudio.

De lo anterior que persistan factores que abonen a la baja productividad en México, como el rezago educativo, que afecta a 25 millones de personas en el país según los cálculos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), o el amplio contraste que existe entre las regiones norte y sur respecto a la conectividad digital, como lo expone la OCDE.

Incluso, imperan brechas que acentúan diversas desigualdades dentro del país, donde destaca la diferencia en el acceso al mercado laboral entre hombres y mujeres, y que se expresa dramáticamente en el ingreso promedio que puede ser hasta 35 por ciento mayor para el género masculino, o la asimetría entre los recursos económicos con los que cuenta el hogar más pobre y el más acaudalado de México, que es de 15 veces la diferencia, según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Por ello, OCDE propone una hoja de ruta que concentra aspectos como el aumento de los ingresos tributarios a partir de una mejora en el marco fiscal, acelerar el proceso de transición energética y aumentar la proporción de adquisiciones públicas realizadas digitalmente y limitar la adjudicación directa de contratos para  reducir las oportunidades de corrupción.

“La proximidad geográfica con los Estados Unidos y las ventajas estructurales, incluida la apertura al comercio exterior y la inversión respaldada por un uso extensivo de acuerdos comerciales, un gran mercado interno y estabilidad política, brindan oportunidades significativas para que México obtenga mayores beneficios de las cadenas de valor”, puntualiza el organismo internacional ante las oportunidades que tiene el país para impulsar su economía.

Hacienda agradece la detección de áreas de oportunidad

Aunque han existido diversos avances dentro del escenario nacional, Gabriel Yorio, Subsecretario de Hacienda y Crédito Público,  considera positivo que investigaciones como las que realiza la OCDE puedan mostrar los espacios de mejora que tiene el país para poder generar un mayor crecimiento económico.

“Recibimos con mucho agrado este estudio económico, ya que nos permite pensar hacia el futuro, para seguir consolidando la transformación económica del país y nuestro desarrollo. Este informe nos indica áreas donde tenemos que seguir poniendo especial atención. Continuar combatiendo la evasión para mejorar la recaudación tributaria es una de ellas”, agradece Yorio.

Por su parte, el Subsecretario puntualiza que México ha crecido entre el 3 y 4 por ciento luego de la pandemia, y que para este año Hacienda espera un crecimiento de entre el 2.5 y el 3.5 puntos porcentuales apoyado por el mercado interno y una inversión pública y privada que está alcanzando niveles sin precedentes, mismos factores que la OCDE señala también como los principales motores de la economía mexicana actualmente.