El dólar estadounidense alcanzó su punto más alto en lo que va del año 2024, cerrando este martes 10 de septiembre en 20.10 pesos.
De acuerdo con el indicador en tiempo real de Google, el tipo de cambio no había registrado un nivel tan elevado en meses recientes. El día anterior, lunes 9 de septiembre, el billete verde había finalizado la jornada en 19.90 pesos.
Este es el primer registro en el que el dólar supera la barrera de los 20 pesos, un hecho sin precedentes en el seguimiento histórico de Google de los últimos 12 meses.
Peso cae durante discusión de la reforma judicial
Este incremento en el tipo de cambio ocurre mientras en el Senado de la República se discute una controversial reforma al Poder Judicial de la Federación, que propone la elección por voto popular de ministros, jueces y magistrados.
La reforma ha sido duramente criticada por la oposición, que considera que atenta contra la independencia del sistema judicial. Asimismo, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, ha manifestado su preocupación, advirtiendo que la aprobación de esta reforma podría afectar la confianza de los inversionistas en el país.
Las declaraciones del embajador Salazar fueron mal recibidas por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien calificó sus palabras como una interferencia en la soberanía mexicana. En respuesta, el mandatario anunció una “pausa” en las relaciones con la embajada estadounidense, tensando aún más la relación diplomática entre ambos países.
La influencia de Estados Unidos en la paridad peso-dólar
Este máximo histórico en el tipo de cambio también coincide con un evento político relevante en Estados Unidos: el primer debate presidencial entre el expresidente Donald Trump y la candidata demócrata Kamala Harris, en el cual se espera que México sea uno de los temas principales de discusión.
El repunte del dólar frente al peso ha sido influido, además, por el temor en los mercados internacionales ante una posible recesión en Estados Unidos, lo que podría desencadenar un efecto dominó en las economías globales. La incertidumbre financiera ha provocado un mayor nerviosismo en los inversionistas, contribuyendo al fortalecimiento del dólar.
