El peor enemigo de una persona es el miedo. Uno de los momentos clave en la vida de un joven hacia su transición de adulto es cuando toma la decisión de salir de casa.
Ir en búsqueda de nuevos horizontes no es una tarea sencilla, muchas veces los impulsos emocionales y la inquietud de independizarse lo más pronto posible genera que los jóvenes tomen decisiones precipitadas y en el corto plazo sus planes se frustren al no poder solventar los gastos que se les presentan.
En la actualidad, los jóvenes que dejan el lugar donde crecieron tienen entre 27 y 30 años, anteriormente esto pasaba a los 24. La razón principal, es por la situación económica que enfrenta el país y las limitadas ofertas laborales.
A pesar de lo anterior, existen múltiples ventajas al dejar las comodidades del hogar, pues las personas comienzan a hacerse cargo de su vida y no dependen en absoluto de sus padres, además tienen la responsabilidad de cuidar sus ingresos ya que de ellos depende su subsistencia.
Mentalízate al salir de casa
Antes de partir piensa en el lugar en donde te gustaría estar, visualiza todo lo que quieres hacer y cómo quieres vivir. Gabriela Aguado, directora del Instituto de Finanzas Personales recomienda que para dar este paso, primero se deben planear todos los movimientos con varios meses de anticipación, para tener presente el costo que representará la renta, el transporte, los gastos fijos y la comida.
“La idea de que vayan pensando en un espacio los ayuda a valorar si pueden asumir todos los gastos o si necesitarán de un roommate para cubrirlos”.
Ahorra con tiempo antes de salir de casa
Para evitar los problemas económicos una vez fuera de casa, toma precauciones y ahorra desde un año antes.
La experta en finanzas personales sugiere que se haga una lista de todos los gastos para que se pueda juntar, durante el periodo de ahorro, lo equivalente a tres meses de estancia, con la intención de tener una reserva que te dé tranquilidad.
“En la actualidad, miles de jóvenes se enfrentan a sueldos irregulares, muchos de ellos no tienen empleos fijos, cuando son freelance hay veces que tienen dinero y otras no, por eso deben de tener recursos bajo la manga”.
Sé creativo
Si a pesar de tener cubiertos tres meses de renta te preocupa perder la constancia en los pagos por miedo a que tu sueldo no te alcance, abre tu mente y descubre tus talentos.
La directora del Instituto de finanzas personales comenta que además de tu trabajo busques la forma de crear o vender cosas por tu cuenta, para que generes ingresos extra que te permitan manejar cualquier evento inesperado.
“Puedes hacer una lista de lo que sabes hacer, si tocas la guitarra, opta por dar clases, o bien, vende cosas por internet. Solo organiza tus tiempos”.
No te vayas enojado
Sal de tu casa con la idea de que no vas a regresar. No te vayas por huir de los problemas, pues esos siempre se van contigo.
La coach financiera comparte que los jóvenes que se van a salir de su casa deben despedirse desde el amor y el agradecimiento para que no se lleven ciclos abiertos, y esto les permita regresar si es que afuera se encuentran con un problema.
“Los jóvenes no deben independizarse por berrinche, porque si se van y algo sale mal deberán regresar a casa de sus papás. Es importante que también aprendan a pedir ayuda, porque sus problemas los podrían rebasar”.
Sé consciente de tus gastos
Aprende a reconocer que es lo que te hace falta y a olvidarte de lo que es innecesario. Gabriela Correa argumenta que para que el sueño de salirse de casa se haga realidad es necesario estar al pendiente de los gastos magia que se hacen, pues muchas veces la quincena se gasta en entretenimiento o en artículos que se desecharán en poco tiempo.
“Si tan solo supieran lo que invierten al mes comprando un café todos los días, no gastarían, al contrario, lo ahorrarían para pagar por solventar su espacio”.
