Bancos cobran más comisiones en México que en otros países

Las instituciones bancarias mexicanas mantienen un cobro excesivo de comisiones pese a que los procedimientos se han hecho más sencillos con el apoyo de la digitalización, advierte Di Costanzo
Roberto Hernández Roberto Hernández Publicado el
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La banca privada en México cobra entre cuatro mil y cinco mil tipos de comisiones diferentes en sus productos bancarios, mismas que se han convertido en una carga para los usuarios pero también para los pequeños negocios que quieren participar de los beneficios de la integración financiera.

Mario Di Costanzo, economista mexicano y ex titular de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), advierte que los bancos se han convertido en una especie de socios pasivos de los usuarios de los servicios financieros.

“Desde luego que es una cantidad muy grande de comisiones, por eso es que a los usuarios les es difícil comparar, pero de ese número de comisiones, entre 20 y 25 son las que le generan a los bancos entre 80 y 90 por ciento de los ingresos que tiene por comisiones”, señala en entrevista con Reporte Índigo.

El porcentaje del cobro de comisiones en México es más elevado que en otros países aunque se trate de la misma compañía bancaria, señala Di Costanzo. Por ejemplo, de los ingresos totales de CitiBanamex en México las comisiones representan 43 por ciento, mientras que en Estados Unidos 18 por ciento; en el caso de Bancomer en México son 36 por ciento de los ingresos y en España 18 por ciento.

En el caso de HSBC en México el cobro de comisiones alcanza 33 por ciento de sus ingresos totales, mientras que en Gran Bretaña es de 25 por ciento; en Scotiabank en México es de 19 por ciento y en Canadá 14; en tanto que Santander en México alcanza 39 por ciento y en España 20 por ciento.

Este tipo de prácticas benefician principalmente a cinco bancos: Banorte, BBVA, HSBC, Scotiabank y Santander, además el economista explica que el abuso en los cobros radica en la disparidad del costo-beneficio y señala que las comisiones por transacciones con tarjeta bancaria deben estandarizarse.

“Lo que debería suceder es que, como en otros países, en lugar del porcentaje de la venta que sea una cantidad fija, lo que están cobrando es el costo de la transmisión de la llamada al banco.

Este tipo de dinámicas están impactando a los usuarios de servicios financieros pero también a comercios. Pero también actúa como una barrera para integrarse al sistema financiero del país, por ejemplo, ocho por ciento de los mexicanos que prefirieron evitar adquirir una tarjeta de crédito en 2021 lo hicieron debido a las altas comisiones, esto de acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2021.

“Desde luego que es un impacto a los comercios porque por tratar de ganar mercado y recibir en sus comercios el pago con tarjeta de crédito tienen que ‘mocharse’ con una parte de sus ventas, pero a razón de qué si el banco no está arriesgando.

“El banco se vuelve un socio pasivo porque no solo no arriesga sino que tampoco aporta capital, simplemente porque (el establecimiento) pueda recibir tarjeta de crédito exige un mínimo de dos por ciento de las ventas”.

Regulación paulatina

Di Costanzo insiste en la necesidad de regular los cobros de las comisiones, sin embargo, hace énfasis en que debe ser un proceso gradual y con el apoyo de la banca para que no sea una dinámica contraproducente.

“No se puede decir: ‘hoy vamos a bajar todas las comisiones a la mitad’, eso podría ser dañino para la industria y para el sector, tenemos que ir producto por producto ”, pues asegura que la dinámica actual está impidiendo la bancarización.

Además, considera que la estrategia de los bancos debería cambiar de rumbo y dejar de depender de los cobros de comisiones.

 

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