Argentina inquieta a inversionistas

El ministro de Economía Axel Kicillof pasó ocho meses restableciendo los vínculos de Argentina con los mercados internacionales, para luego hacer caer al país en cesación de pagos, negándose a hacer concesiones a los acreedores para resolver sus deudas impagas.

Ahora, está tomando un rumbo decididamente distinto.

En vez de conciliación, Kicillof, de 43 años, se ha embarcado en una campaña para eliminar a los opositores de la administración y aumentar el control del gobierno sobre la economía. 

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El ministro de Economía Axel Kicillof pasó ocho meses restableciendo los vínculos de Argentina con los mercados internacionales, para luego hacer caer al país en cesación de pagos, negándose a hacer concesiones a los acreedores para resolver sus deudas impagas.

Ahora, está tomando un rumbo decididamente distinto.

En vez de conciliación, Kicillof, de 43 años, se ha embarcado en una campaña para eliminar a los opositores de la administración y aumentar el control del gobierno sobre la economía. 

Desde la cesación de pagos, el ministro ha denunciado a empresarios y productores rurales por acaparar de todo, desde los autos hasta la soya con el fin de provocar una devaluación. 

El 30 de septiembre, sus comentarios fueron repetidos por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien amonestó públicamente al presidente del banco central, Juan Carlos Fábrega, por no poder controlar la manipulación cambiaria. Éste renunció al día siguiente.

En tanto, la influencia de Kicillof no ha hecho más que crecer con una serie de cambios en el gabinete, que han llevado al poder a sus aliados políticos, el mercado de bonos está cada vez más alarmado por este giro. 

Ante la perspectiva de que Kicillof permita que la disputa de un decenio con los acreedores hunda aún más la economía en una recesión y lleve adelante políticas que ahonden su aislamiento financiero, los títulos de deuda de Argentina sufrieron sus mayores pérdidas en siete semanas.

“La acción de los precios refleja una tendencia preocupante en la dirección de la política económica”, dijo por teléfono desde Nueva York Jorge Mariscal, director de inversiones para mercados emergentes en UBS Wealth Management.

“La consolidación del poder con Kicillof es una consolidación de la manera errada de manejar la economía. Antes había una voz de disenso en el banco central y ya no está”.

Pérdidas de los bonos

Jesica Rey, portavoz del Ministerio de Economía, no respondió a un correo electrónico de consulta sobre las políticas de Kicillof o las recientes designaciones en el gobierno.

Los bonos del Estado argentino con vencimiento en 2014 cayeron 6.3 por ciento desde que renunció Fábrega el 1 de octubre, hasta 84.7 centavos por dólar, de acuerdo con datos recopilados por Bloomberg. 

En comparación, la deuda de mercados emergentes perdió un promedio de 0.5 por ciento durante ese periodo.

En julio, los rendimientos de los bonos argentinos cayeron hasta el nivel más bajo desde 2011 ante las versiones de que Kicillof llegaría a un arreglo con un grupo de acreedores no reestructurados para evitar la cesación de pagos.

Anteriormente había negociado un pago por 5 mil millones de dólares a Repsol SA para indemnizar a la empresa por la confiscación del 2012 que él contribuyó a urdir. 

También reformó las estadísticas gubernamentales a pedido del Fondo Monetario Internacional y aceptó pagar al Club de París 9 mil 700 millones de dólares de deuda vencida.

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