Hidalgo es uno de los estados donde el negocio del huachicoleo o la extracción ilegal de combustible de los poliductos de Petróloes Mexicanos (Pemex) se disparó, pues las atractivas y jugosas ganancias despertaron la práctica ilegal.
En el municipio hidalguense de Tlahuelilpan donde una explosión la tarde de ayer dejó 67 víctimas mortales y 76 más con lesiones graves la práctica de perforar los ductos se incrementó en años recientes.
De acuerdo a Pemex de 2000 a 2018 se detectaron 71 tomas clandestinas en el municipio sureño de Hidalgo; 2017 es el año de auge de piquetes con 38 sucesos, En el 2000 solo se registró un evento, mientras que de 2001 a 2010 no hubo incidentes. A partir de 2011 regresó la práctica ilícita con un evento; ninguno en 2012; seis en 2013; ocho en 2014; dos en 2015; seis en 2016; y nueve el año pasado.
Para el 2018 los piquetes a los ductos de Pemex en Hidalgo se incrementaron y pasó a ser la segunda entidad con más casos con mil 726 eventos, solo fue rebasada por Puebla con mil 815 perforaciones, Guanajuato en tercer lugar con mil 547, después Veracruz con mil 338 casos, y el Estado de México en quinto sitio con mil 268 incidentes; en el país se registraron 12 mil 581 casos.