El sueño de muchos de los aficionados al futbol mexicanos parecía a punto de cumplirse: que en nuestra nación volviera a organizarse una Copa Mundial de Futbol en 2026, de la mano de Estados Unidos y Canadá, con una triple candidatura ante la FIFA, sin embargo, la violencia y las violaciones a los Derechos Humanos podrían poner fin a las aspiraciones.
De acuerdo con un informe presentado por la compañía Ergon, de Reino Unido, dedicada a vigilar la aplicación de los derechos humanos en organizaciones como la Comisión Europea, el Banco Mundial, y empresas como Apple, hay “posibles impactos” en los derechos humanos de quienes visitarían México con el fin de presenciar o participar en los partidos, incluyendo aficionados, jugadores, miembros del equipo, y funcionarios.
En el informe, que fue entregado a la FIFA, se señala que en nuestro país hay “deficiencias en la implementación de las normas legales o de factores conceptuales o locales”.
LA VIOLENCIA CONTRA LA PRENSA
Ergon advierte de las agresiones constantes a las que se enfrentan los periodistas mexicanos, y recuerda que hay “muestras significativas de amenazas verbales, físicas y violentas, incluyendo el asesinato por sus actividades. Este riesgo sólo será amplificado en el contexto de una Copa del Mundo de la FIFA”.
En nuestro país, el año pasado, 12 profesionales de la Comunicación fueron asesinados.
Los recientes casos de acoso en la capital del país no fueron pasados por alto.
Ergon indicó que “una encuesta de la ONU sostiene que la mayoría de las mujeres en la Ciudad de México han experimentado algún tipo de violencia sexual (incluido el acoso verbal y el contacto físico no deseado), en sus viajes diarios, lo que plantea problemas de relación con la seguridad de las trabajadores, las espectadoras y aficionadas”.
La guerra contra el narcotráfico también fue abordada en el texto.
De concretarse los deseos de México, Estados Unidos y Canadá, CDMX, Guadalajara y Monterrey serían las ciudades elegidas para celebrar los encuentros deportvos; Ergon consideró que la violencia relacionada frecuentemente se mantiene fuera de estos sitios, pero llamó a estar alerta a la evolución y eventual impacto de un Mundial en materia de seguridad pública.
Si el Mundial no llega a Norteamérica, Marruecos sería la sede elegida por la FIFA.