Vendaval tricolor; México, a Cuartos de Final del Clásico Mundial

México vapuleó ayer a Canadá, hiló tres victorias y se instaló entre los ocho mejores del Clásico Mundial; esta vez, Randy Arozarena fue el héroe y el próximo partido ya hay pitcher abridor: Julio Urías
Francisco Sánchez Francisco Sánchez Publicado el
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Tras la caída ante Colombia en el primer juego de este Clásico Mundial, no tardaron las críticas hacia la novena de México. Luego, regresó en grande la ilusión con el triunfo ante Estados Unidos; siguió el sufrimiento ante Gran Bretaña y, finalmente ayer, la alegría ante Canadá.

Así es, México clasificó a los Cuartos de Final del torneo internacional y lo hizo de la mano -más bien del bat- de un pelotero cubano, pero nacionalizado tricolor: Randy Arozarena, quien se ha tomado “en serio” su papel de mexicano al grado de portar una máscara de lucha libre en el juego contra los británicos.

El big leaguer conectó dos dobles y sumó cinco carreras remolcadas, para ser la gran figura del equipo mexicano que tuvo una cómoda victoria por 10-3 sobre los canadienses, quienes hicieron daño con jonrones de Edouard Julien y Bo Naylor.

Arozarena fue un dínamo imparable en el estadio Chase Field de Phoenix, Arizona. Aparte de los dobles, recibió una base por bola y fue golpeado dos veces. Vació las bases en el sexto rollo con su segundo doble de la tarde, justo cuando el partido estaba en el alambre, pues México apenas ganaba 3-2.

Y entonces, tras ampliar la ventaja, las cámaras lo captaron y, una vez más, posó con los brazos cruzados.

“Esto es con flow. Hay que divertirse. El beisbol te da grandes momentos como los que estoy viviendo en el Clásico con México. Entonces, es felicidad y es una nueva celebración. Es para posar para todas las cámaras para que te agarren con una buena foto”, comentó Arozarena en entrevista para MLB Network.

Mexicano, ‘hecho y derecho’

Con sus cinco carreras producidas, Arozarena, quien fue Novato del Año de la Liga Americana con los Tampa Bay Rays en 2021, llegó a nueve en el torneo, y rompió el récord impuesto por Jorge Cantú en 2009, en cuanto al mayor número de anotaciones remolcadas para un jugador mexicano en una edición del Clásico Mundial.

Está en plena forma representando a la franela mexicana, pues dice tener una deuda con nuestro país.

“Representar a México es un orgullo porque cuando salí de Cuba, me recibieron con los brazos abiertos. Siempre dije que quería representar a México en un Clásico Mundial”, señaló hace unos días en entrevista para Excélsior. Además, tiene una hija nacida en el territorio nacional.

Por ello, Randy, quien llegó a México en 2016, agilizó los trámites para obtener la nacionalidad y disputar este torneo. Fue el único que necesitó de este proceso, aunque haya más extranjeros en el equipo que dirige Benjamín Gil.

“Véanme, soy otro mexicano y me siento así. Todos me han recibido bien y esta convivencia sólo se tiene en un equipo que va para cosas grandes”.

Y tiene razón: luego de tres victorias al hilo, imponiéndose a Estados Unidos, Gran Bretaña y Canadá, México avanzó a la ronda de los ocho mejores como líder del Grupo D.

“Estoy contento por el proceso que he tenido para llegar aquí. Los récords vienen solos con el trabajo (…) Los fanáticos me hacen feliz y todo el apoyo hace que siempre dé el 100 por ciento de mi capacidad”
Randy ArozarenaJugador México

Y sí, Arozarena fue la estrella ayer; sin embargo, el poder al bat mexicano no radica sólo en él. Rowdy Téllez, de los Milwaukee Brewers, conectó un sencillo remolcador de dos carreras en el primer episodio y añadió un jonrón solitario en el octavo inning para ser figura también en el ataque.

Por su parte, Joey Meneses, de los Washington Nationals, y quien fue el héroe en el partido ante los estadounidenses, se fue de 5-2 con una empujada y una anotada.

Téllez también se mostró más que honrado por representar a México: “Ser parte de este equipo es increíble. Me llamaron y de inmediato acepté. Vencer a Estados Unidos fue un momento muy especial. Una atmósfera electrizante”, dijo ayer en conferencia de prensa tras el partido.

Urías, el elegido

Y ahora, ¿qué sigue? La novena nacional emprenderá el viaje a Miami para medirse el sábado contra el ganador del duelo entre República Dominicana y Puerto Rico, que al cierre de esta edición era ganado 5-1 por los boricuas. Sea cual sea el rival, Gil ya tiene al pitcher abridor: Julio Urías, quien busca revancha tras lo ocurrido en el juego ante Colombia.

En su primer juego en este Clásico, el as de los Dodgers aceptó tres hits y tres carreras limpias en cinco entradas de labor. Todas ellas cayeron en racimo en la quinta entrada cuando los colombianos se fueron arriba.

El mánager también resaltó la labor del pitcher José Urquidy, quien, dijo, “se fajó, nos dio cuatro entradas de calidad”.

El pitcher de los Houston Astros toleró dos carreras, con cinco ponches, para acreditarse la victoria. El revés fue al registro de Rob Zastryany tras conceder tres anotaciones en dos episodios.

 

Cuba, a Semifinales

Tras un inicio incierto, Cuba volará también a Miami para disputar las Semifinales del Clásico Mundial, esto tras derrotar 4-3 en los Cuartos de Final a Australia.

“Cuba está muy emocionada en este momento. Nosotros trabajamos para cambiarle la cara a nuestro beisbol, para nuestro pueblo que desde hace tiempo lo estaba esperando”, dijo el mánager Armando Johnson.

Los isleños vuelven a la antesala de la Final por primera vez desde 2006 y lo hacen por vez primera con jugadores de Grandes Ligas.

Por su parte, Venezuela derrotó 5-1 a Israel y terminó de manera invicta la Fase de Grupos del certamen y como líderes del Grupo D.

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