El Ministerio de Salud de Brasil informó que se han documentado 41 casos de COVID-19 relacionados con la Copa América: 31 contagios en jugadores o integrantes del cuerpo técnico y 10 en trabajadores contratados para el certamen.
En un comunicado, la dependencia gubernamental informó que los trabajadores que dieron positivo se encontraban en Brasilia, donde Brasil puso en marcha el torneo el domingo, con una goleada de 3-0 sobre Venezuela.
La “Vinotinto” jugó diezmada, tras registrar casi una docena de casos de coronavirus entre sus integrantes, incluidos jugadores y empleados.
Brasil fue designado sede de emergencia de este certamen que disputan 10 selecciones sudamericanas, pese a que el país presenta el segundo mayor número de muertes confirmadas por COVID-19 en el mundo, con casi 490 mil.
El presidente Jair Bolsonaro ofreció albergar el torneo hace apenas dos semanas, después de que Colombia y Argentina quedaron descartadas. El mandatario ha criticado las políticas de distanciamiento social y argumenta que el impacto económico de la suspensión de actividades productivas es más mortífero que el propio coronavirus.
De acuerdo con el Ministerio de Salud, se han realizado hasta ahora mil 927 pruebas de COVID-19 en relación con la Copa América.
El último caso se registró ayer por la mañana: uno de los preparadores físicos de Perú dio positivo en Lima. Néstor Bonillo no viajará a Brasil.
El fin de semana, hubo una serie de casos de COVID-19 relacionados con las selecciones que acuden a la Copa.
Colombia informó que su asistente técnico Pablo Román y su fisioterapeuta Carlos Entrena habían contraído el virus. Horas antes, Venezuela convocó de emergencia a 15 nuevos jugadores, luego que ocho dieron positivo a su llegada a Brasil.
Otros tres integrantes de la delegación venezolana quedaron infectados también.
La Federación Boliviana de Futbol indicó que tres jugadores y un elemento del cuerpo técnico dieron también positivo.
