Uruguay venció a Chile con Bielsa en la banca
La mano de Marcelo Bielsa se comienza a ver con el seleccionado uruguayo el cual venció sin problema a su similar de Chile rumbo al Mundial
APCon dos tantos de Nicolás de la Cruz, uno de Federico Valverde y una nueva personalidad infundida por Marcelo Bielsa, Uruguay abrió su camino en las eliminatorias sudamericanas al Mundial de 2026 logrando una contundente victoria 3-1 contra un Chile al que controló en casi todos los momentos.
En casa y dirigida ahora por el argentino Bielsa, la Celeste demostró un nuevo juego fresco, dinámico y muy bien ensamblado.
En los primeros minutos los equipos se midieron tímidamente. Pero pronto Uruguay comenzó a crear un fútbol atrevido, rápido y bien planificado. Los balones robados o recuperados se convirtieron en la pista de despegue hacia el área rival con una intensidad que la Celeste no solía practicar.
La expresión de seguridad de Valverde fue una de las señas más características del juego. Empujó permanentemente con precisión, pases veloces, ritmo y una visión global del juego providencial, demostrando por qué es capitán.
Aunque lució el trabajo de conjunto, individualmente se destacaron tanto Valverde como Manuel Ugarte.La polivalencia de Ugarte, la ocupación de espacios, la marca quirúrgica, el pase al pie, la creación, su presencia en defensa y en ataque lo convirtieron en uno de las más claros artífices y creadores de la victoria Celeste.
El primer gol a los 38 minutos, fue obra del mediocampista De la Cruz. Comenzó en el medio de la cancha con Ugarte, que conectó con Maximiliano Araújo una pelota en profundidad que parecía iba a Darwin Núñez pero el delantero del Liverpool dejó pasar, ya en el área chica, y el balón terminó en el fondo de la red por el remate de De la Cruz.
“Nos llevó quince minutos dominar el partido y después del gol de ellos hubo un segmento del partido donde sufrimos”, analizó Bielsa. “El parido podría haber terminado con una diferencia mayor a favor nuestro, pero también una diferencia menor a favor nuestro”.
En cuanto al sorpresivo tipo de juego que desplegó la Celeste se lo adjudicó al “estilo y cualidad de los jugadores. El entrenamiento fue de un solo día. Nada de lo que el equipo mostró tiene que ver con la influencia del trabajo”, dijo.
“Me gusta el estilo de los jugadores uruguayos. El modelo de juego lo imponen las individualidades, no el entrenador”, dijo.
En el primer tiempo Uruguay siguió presionando. Mientras Chile intentaba sobre todo cortar el juego rival sin mucha creación ni iniciativa.
Uruguay siguió aprovechando cada pequeño error chileno para arremeter. En el primer tiempo Núñez erró tres claras oportunidades, una de ellas mano a mano con Cortés. En el segundo tiempo tampoco tuvo la suerte de conectar a pesar de algunas oportunidades.
El segundo gol llegó cuando Ugarte recuperó en el medio campo, conectó con De la Cruz que hizo la pausa y tocó cerca de la medialuna para Valverde, quien enganchó, se sacó la marca, y golpeó con dureza al arco de un Cortés que no llegó al pelotazo certero contra el palo izquierdo a los 46 minutos.
En el segundo tiempo Uruguay siguió lastimando al rival. Y cuando Chile intentó tener la posesión del juego y proponer el local sistemáticamente le cerró el paso.
A los 20 del complemento ingresó uno de los jugadores históricos de Chile, Arturo Vidal. Poco después Valverde se llevó en una corrida hasta el área rival una bola que pasó por Darwin Núñez y terminó nuevamente en los pies de De La Cruz y en el festejo del tercer gol.
Pocos minutos después Chile descontó con gol de un Vidal muy atento en el área chica después de un rebote, nacido de un centro fuera del área. Fue la jugada más peligrosa que recibió Uruguay y no la pudo resolver ni la defensa ni el guardameta Sergio Rochet.
Chile no pudo cosechar la ansiada primera victoria en el estadio Centenario ni demostrar su juego, quizás por la presión uruguaya. Eduardo Berizzo, el entrenador visitante tendría muchos ajustes pendientes para la próxima fecha cuando Chile recibirá a Colombia en el Monumental de Santiago.
“Las dificultades por grandes que sean nos obligan a reaccionar”, dijo Berizzo, quien destacó el funcionamiento, carácter y rebeldía de sus dirigidos.
Consideró que las eliminatorias son “un camino largo”, y atribuyó la derrota a “errores colectivos del equipo” que “nos encontraron lanzados con gente rápida”.
“No hicimos el daño proporcional al daño que nos hicieron ellos”, reconoció.
El martes Uruguay visitará a Ecuador en Quito, donde Bielsa y sus jugadores podrían seguir demostrado su juego ofensivo con iniciativa, atrevimiento y sorpresa, que dejaron agradecido al público en Montevideo.
Ecuador es un “equipo muy aguerrido con jugadores que han crecido y llegado a lugares importantes en el fútbol europeo. Es un equipo que defiende bien y que tiene capacidad para crear opciones en ataque. En el partido con Argentina eso quedó bien reflejado”, opinó.