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No hay muchas razones para sonreír en los campamentos de los 49’s y los Carneros.
Ambos llegan al inicio de la Semana Cuatro de la NFL en un mal momento al registrar marca de 1-2, pero sin duda el malestar que viven los de San Francisco es más marcado.
Luego de arrancar la temporada con una victoria sobre los Empacadores, los de San Francisco han registrado dos derrotas consecutivas, la más reciente de escándalo, cuando los Potros los humillaron en su propia casa con un contundente 27-07.
En las dos caídas de los 49’s, se han dado los primeros signos de presión para Colin Kaepernick. El mariscal de San Francisco ha completado menos del 50 por ciento de sus pases en esos juegos y no ha tenido lanzamientos de anotación, pero sí ha sufrido cuatro intercepciones.
Quien fuera la sensación la temporada pasada, hoy tiene que soportar las críticas de los aficionados, al ubicarlo como uno de los culpables de que los subcampeones de la NFL no estén funcionando.
Los Carneros tampoco están en un lecho de rosas, pero la presión que viven no es de la misma intensidad que la que tienen sus rivales de esta noche.
Sam Bradford, quarterback de San Luis, tiene seis pases de anotación y es de lo poco rescatable en este mal inicio de temporada.
Ha completado 88 de los 141 pases que ha enviado hasta el momento, acumula 891 yardas y lo han intercepado en dos ocasiones.
Esto, además de estar en su casa del Saint Louis High, inclina la balanza ligeramente en favor del equipo del coach Jeff Fisher para el juego de esta noche.
Urgidos de triunfo y con la necesidad de calmar el ambiente en sus campamentos, Carneros y 49’s abren la acción de la Semana Cuatro.
La batalla de Aldon Smith
A los problemas que sufren los 49’s de San Francisco, hay que sumarle la baja de Aldon Smith.
Según reportes de la cadena ESPN, el apoyador de los 49’s fue internado en una clínica para tratar su problema de abuso con el alcohol.
Después la derrota ante Ios Potros, el CEO del equipo, Jed York, informó que el apoyador se alejaría por tiempo indefinido.
“No es que vaya a ser curado mágicamente en un mes. Si su problema es lo suficientemente grave, un mes podría no ser suficiente”, dijo una fuente cercana a Smith a ESPN.
El futbolista, quien ayer cumplió 24 años, ha sido arrestado dos veces por sospecha de conducir bajo los efectos del alcohol.
