Unen fuerzas contra la ETC

Tras haber vivido una de sus temporadas más difíciles, no solo por el sonado caso de los árbitros de reemplazo, sino por los suicidos de exjugadores y las demandas de sus familias, la Liga de Futbol Nacional (NFL) prepara una nueva jugada defensiva.

Junto a la compañía General Electric (GE) y la marca deportiva Under Armor, la NFL se unirá en un proyecto de cuatro años para invertir 60 millones de dólares con el fin de diseñar tecnología para detectar, tratar y prevenir lesiones que causen daño cerebral.

GE, que fabrica el equipo médico que cuenta con los sistemas de proyección de imagen de resonancia magnética, invertirá 40 millones de dólares para construir equipo especializado para el diagnóstico de cualquier tipo de traumatismo en la cabeza.

La NFL, GE y Under Armor, también gastarán 20 millones de dólares en realizar investigaciones que les permitan desarrollar nuevas ideas para cascos y equipo de seguridad.

“Siempre hemos creído que la innovación es el camino para resolver problemas. Vamos a poner lo mejor de lo mejor en este esfuerzo”, dijo Jeffrey Immelt, jefe ejecutivo de GE.

Roger Goodell, comisionado de la NFL, dijo que esta nueva sociedad es el último esfuerzo de la Liga, que ha puesto a la prevención de las lesiones en la cabeza como su principal prioridad.

“La NFL ha hecho un tremendo progreso en hacer nuestro juego más seguro y más emocionante. Pero sabemos que aún tenemos mucho trabajo por hacer”, comentó Goodell.

En el Super Bowl del mes pasado, Goodell comentó que la NFL pondrá consultores neurológicos independientes durante los partidos de la próxima temporada, para ayudar a diagnosticar y tratar las conmociones cerebrales.

La Asociación de Jugadores de la NFL, invertiría 100 millones de dólares para trabajar con la Universidad de Harvard, en un estudio durante una década sobre la salud a largo plazo de los futbolistas.

Según The Washington Post Unos 4 mil exjugadores de la NFL han demandado a la Liga por daños y lesiones en la cabeza que dicen, las sufrieron en el campo. 

La encefalopatía traumática crónica (ETC), una enfermedad del cerebro causada por repetidos golpes de cabeza, se ha encontrado en las autopsias de al menos tres exfutbolistas que se suicidaron, incluyendo al apoyador Junior Seau.

La misteriosa proteína Tau

Además de los golpes, recientemente apareció otro “jugador” que podría aumentar el daño cerebral en los exfutbolistas.

Los exjugadores, Wayne Clark y Fred McNeill, de los Cargadores de San Diego y los Vikingos de Minnesota respectivamente, participaron en un estudio piloto en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), en el que podría haberse descubierto una proteína destructiva llamada tau en el cerebro de cinco jugadores vivos pero que ya están retirados.

La proteína tau se ha encontrado, post-mórtem, en el cerebro de docenas de exjugadores de la NFL, entre los que están Junior Seau, Dave Duerson, Terry Long, Shane Dronett y Mike Webster. Todos ellos se suicidaron y más tarde se descubrió que tenían  encefalopatía traumática crónica (ETC).

Algunos científicos dicen que haber encontrado la enfermedad en el cerebro de jugadores vivos es el “santo grial” de la investigación acerca de la ETC, y una vía a su diagnóstico y tratamiento. El estudio de la UCLA podría ser el primer paso importante en esa labor.

Lo malo de la buena protección

Concientizar a los jugadores y coaches es otra medida que la NFL debe trabajar, tomando en cuenta que la fuerza y forma en la que se ataca a algunos jugadores, como los receptores, en ocasiones es desmedida. El contar con mejores equipos de protección, le da confianza a algunos jugadores para llegar a golpear sin pensar en que puedan dañar a sus colegas.Este argumento lo presentan algunos especialistas, quienes toman en cuenta que en décadas anteriores, el número de lesiones cerebrales en exjugadores no era tan alto como ahora.