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Hay razones para que los aficionados de Miami se espanten en el inicio de la Semana Nueve de la NFL.
Justo en la noche donde Estados Unidos celebra el Halloween, los Delfines recibirán la visita de unos Bengalíes que llegan con los suficientes argumentos como para asustar a su rival.
Los de Cincinnati suman cuatro victorias consecutivas luego de derrotar a Patriotas, Bills, Leones y Jets, estos últimos por un escandaloso 49-9.
Andy Dalton, mariscal de campo de los Bengalíes, suma 11 pases de anotación en los últimos tres partidos, cinco de ellos los consiguió la semana pasada ante los Jets.
El ala abierta, Mavin Jones, atrapó cuatro de esos cinco touchdowns e impuso un récord para la franquicia con más recepciones de anotación en un solo juego.
Según cifras de ESPN, Dalton ha lanzado la tercera mayor cantidad de yardas aéreas (mil 246) y la segunda mayor de touchdowns (11) en las últimas cuatro semanas. Dalton también ha lanzado para 300 yardas en cada uno de sus últimos tres juegos, la mayor racha de su carrera.
Mientras el equipo que dirige el coach Marvin Lewis se ubica como líder de la División Norte de la Conferencia Americana con marca de 6-2, sobre los Delfines parece haber caído una maldición al ligar cuatro derrotas consecutivas.
La semana anterior, Ryan Tannehill, quarterback de los Delfines, fue capturado seis veces por la defensa de Patriotas, lo que lo convirtió en el mariscal con más capturas en su contra en toda la NFL al acumular 26.
Esto habla de la falta de protección que da la defensa de los Delfines, esa misma línea que permitió 24 puntos sin respuesta para perder 27-17 ante los Patriotas.
Con estas razones, las casas de apuestas dan como favorito para llevarse el triunfo a los Bengalíes.
Todo indica que la noche de Halloween podría ser una velada llena de pesadillas para los de Florida, que todavía no encuentran la fórmula para volver al camino del triunfo justo cuando se llega a la mitad de la temporada de la NFL.
