La mejor forma de quitarse el amargo sabor de una eliminación es ganando el torneo siguiente, y eso fue lo que hizo el serbio Novak Djokovic.
El número uno del mundo, quien había sido eliminado de Wimbledon en la tercera ronda, derrotó por 6-3 y 7-5 a Kei Nishikori, conquistando de esta forma su cuarta Rogers Cup.
Esta victoria también significó el título número 30 de un Masters 1000 para “Nole”, una marca histórica en el tenis mundial.
Djokovic suma siete títulos en esta campaña y 66 en su carrera.
Halep se corona
Antes de la Final varonil, la rumana Simona Halep pudo sacarse la espina y coronarse en este torneo que el año pasado se le había escapado.
La quinta sembrada del torneo conquistó su tercer título de la temporada tras vencer en 75 minutos a la estadounidense Madison Keys.
Con parciales de 7-6 y 6-3, Simona escribió su victoria, la cual le permitirá escalar dos posiciones dentro del ranking de la WTA, por lo que hoy amanecerá como tercera del mundo, por debajo de Serena Williams y Angelique Kerber.
Más vale prevenir. Solo también presumió una malla que llevará a Río.
Halep pudo haber sumado otro título ayer, pero perdió la Final de Dobles, luego de que ella y su compatriota Monica Niculescu, cayeran ante la pareja de las rusas Ekaterina Makarova y Elena Vesnina por 6-3 y 7-5.
Todo un maestro
La mejor forma de quitarse el amargo sabor de una eliminación es ganando el torneo siguiente, y eso fue lo que hizo el serbio Novak Djokovic.
El número uno del mundo, quien había sido eliminado de Wimbledon en la tercera ronda, derrotó por 6-3 y 7-5 a Kei Nishikori, conquistando de esta forma su cuarta Rogers Cup.