El nuevo estadio de Tigres fue cancelado ya que la Universidad Autónoma de Nuevo León y la empresa Juego de Pelota México S.A.P.I de C.V., no pudieron entregar evidencia sobre la donación de un área de 44 mil metro cuadrados en comodato.
Ese terreno serviría para la construcción del nuevo inmueble y es requisito para las reservas que se impusieron en el decreto que autorizó el Congreso del Estado.
“Está cancelado ya, porque no se cumplió, se tendrá que ver que se planteé un nuevo mecanismo. Hace días el gobernador dijo en medios de comunicación que no había proyecto, contradiciendose a que decía que ya había dos nuevos estadios. Así es que hay que darle el seguimiento jurídico, para darle forma y que los que somos Tigres podamos tener el estadio que nos prometieron”, dijo a ESPN Mauro Guerra, Presidente del Congreso de Nuevo León.
El comodato se debió entregar como evidencia el 30 de noviembre, algo que no ocurrió hasta las 12 de la noche de ese día.
“Para efectos de que entre en vigor el presente Decreto, la Universidad Autónoma de Nuevo León a más tardar el 30 de noviembre del año 2023 deberá otorgar la parte correspondiente del predio a favor de Juego de Pelota México, S.A.P.I de C.V. que formará parte del proyecto integral”, se puede leer en el decreto publicado el 30 de junio del 2023.
En el caso de no cumplirse con los plazos, “se tendrá por no otorgada la concesión objeto del mismo”, se lee en el documento. Esto fue confirmado por el diputado Mauro Molano, presidente de la Comisión de Infraestructura y Desarrollo Urbano de Nuevo León: “No se ingresó nada”, comentó. “No hay posibilidad, nunca pidieron una prórroga ni nada”, señaló sobre dar un tiempo más para entregar documentos.
“Se dio una fecha límite para que se implementara el plan, para que se hiciera el acuerdo, Juego de Pelota que fue la empresa que el gobierno del estado pidió. Hoy estamos a primero de diciembre y pues no se cumplió con la cláusula, con esta petición que se hizo por parte del Congreso. Estaremos en espera de continuar con los análisis jurídicos de lo que se pueda hacer para continuar con el proyecto, que hoy es inexistente”, siguió el Presidente del Congreso de Nuevo León, Mauro Guerra.
Sin comunicación
El decreto aprobado por el Congreso Estatal solicitaba de la misma manera avances en las obras y un calenddario de actividades y ejecución, aunque hasta ahora no han tenido contacto entre los diputados y los involucradas.
“Se puso ese condicionante, para que no fuera un cheque en blanco, estos terrenos que se utilizan para el deporte infantil y juvenil. Sin el aval de la Universidad Autónoma de Nuevo León o sin el comodato, era un proyecto inconcluso, incompleto, por lo tanto ese candado se buscó con ese espíritu, dame muestras de que va avanzando el proyecto y que tienes el predio total”, dijo a ESPN Javier Caballero, quien es vocal de la Comisión de Infraestructura y Desarrollo Urbano.
Por su parte, Tigres, aseguró que el tema del estadio le corresponde a la empresa involucrada y al Congreso de Nuevo León.
“Sabemos que no avanzó, que no se dió este ceder, porque la Universidad tendría que ceder un terreno que hasta el día de hoy no lo ha hecho. ¿Por qué hacerlo? Ante una organización que ha sido cuestionada a nivel internacional, que tampoco le dió continuidad al proyecto, vemos que hoy al cumplirse la fecha, se incumplió lo que se comprometieron y lo que había prometido”, sentenció Mauro Guerra.
“El Comodato a no cumplirse, se tendría que presentar un nuevo proyecto y la Comisión de Desarrollo Urbano e Infraestructura tendría que darle seguimiento a este nuevo asunto”, finalizó el presidente del Congreso de Nuevo Léon, sobre Nuevo Estadio de Tigres.