Jannik Sinner no falló este domingo a su cita con la gloria en Turín. En su casa, ante su público y sin ceder un solo set en el torneo, se coronó campeón invicto de las Finales ATP tumbando al estadounidense Taylor Fritz (6-4 y 6-4) para graduarse como nuevo ‘Maestro’ en un año pletórico para él.
Así es, el tenis mundial tiene un nuevo ‘Maestro’. La nueva generación ya está aquí y Sinner es el primero en asaltar el cetro del tenis mundial con una gran exhibición en tierras italianas, en su casa, ante un público rendido a su nueva estrella, al que coreó sin descanso.
THE UNDEFEATED ITALIAN KING 👑🇮🇹
In front of his adoring public, World No. 1 @janniksin becomes the first Italian to capture the Nitto ATP Finals title, defeating Fritz 6-4 6-4!!!#NittoATPFinals pic.twitter.com/fObgL0n4U9
— ATP Tour (@atptour) November 17, 2024
Es el primer italiano en levantar este título y por ello ya es historia de su país con solo 23 años. Ahora defenderá la corona de campeón en la Copa Davis. De reto en reto.
Su temporada es de altísimo nivel. En el mismo año que bordó sus dos primeros Grand Slam, los de Australia y Estados Unidos, cerró el circuito ATP con el título más importante a final de temporada.
Pese a la gran ausencia de Novak Djokovic este año, pese al constipado de Carlos Alcaraz o la derrota de Alexander Zverev en Semifinales, nada puede discutir la superioridad aplastante de Sinner en este torneo.
Fritz va a tener pesadillas con Sinner. Porque en la Final del Abierto de Estados Unidos, de ‘su’ torneo, cayó ante el de San Cándido. El martes pasado, en la Fase de grupos, también perdió.
Y, aunque a la tercera suele decirse que va la vencida, volvió a sucumbir ante el registro espectacular de un tenista sin límites. Todos los partidos sin poder hacer un set al tenista más en forma del circuito.
No es que Fritz no jugara bien. Es que, sencillamente, Sinner estuvo otra vez intratable. Apenas cometió errores. Resiliente en defensa y clínico en ataque. Y, si no comete fallos, con la técnica de sus golpes, veloces y potentes, las oportunidades para ganar son mínimas. Prácticamente inexistentes.
Al ganar sus cinco partidos en ruta hacia el trofeo, Sinner ganó 4.8 millones de dólares, el premio más grande para el ganador en la gira masculina.