Sin temor a los grandes

La ciudad de Eibar está de fiesta, con tan solo 27 mil personas, esta población ubicada a 40 minutos de San Sebastián y golpeada por la crisis industrial, se desvive por su equipo, que a falta de cuatro jornadas para que termine la temporada, lo tiene todo para estar con los grandes.

Paseando por sus calles, se podía ver que viven una ilusión,de su “modesto” equipo, banderas y bufandas en sus balcones ondean con orgullo y marcan la buena trayectoria del conjunto “Armero”, un equipo que “vive a la sombra” de sus vecinos mayores, como son Athetic Club y la Real Sociedad.

Cuatro horas antes del partido contra el Ponferradina, se podían ver a grandes y pequeños con la camiseta azulgrana que lucían orgullosos.

Los aficionados hablaban de la ilusión de poder saborear en primera persona partidos de la Liga BBVA, todo un sueño, ya que hace solo un año disputaban partidos en la Segunda División B.

Una afición que respeta a los rivales, ya que se podían ver muchos de los seguidores visitantes discutiendo amablemente del futbol. Eibar y el Pais Vasco se ha considerado siempre un “país” abierto y amable, y en esto del futbol no podía ser menos.

Su campo Ipurúa, que tiene una capacidad de 5 mil espectadores, suele ser un fortín inexpugnable para los rivales, aunque esta temporada está “fallando” más de lo normal. 

Tiene el encanto de un campo inglés, nada que ver con los modernos estadios de hoy en día, y la gente de Eibar lo tiene muy claro, “la temporada que viene, si jugamos en Primera jugaremos en Ipurúa”.

Este equipo fue obligado a hacer una ampliación de capital de cinco veces su presupuesto, que es de 400 mil euros, están cerca del 18 por ciento de su objetivo, y esperan llegar pronto para no tener problemas en caso de subir de categoría.

Para conseguir su meta de aumentar el presupuesto que se les pide para no tener problemas en la Liga BBVA, la directiva inició la campaña #defiendealEibar, donde se busca que la afición colabore economicamente.

En estos momentos, las acciones del equipo se venden en 50 euros (70 dólares), las cuales subirían considerablemente su valor si el Eibar confirma su ascenso a la Primera División española.

Uno de sus jugadores, José Ignacio “Jota” Pelleteiro, nos contó que la permanencia era un primer objetivo, pero la ambición y las ganas de seguir creciendo con una plantilla joven y talentosa han llevado a este equipo ha ser el segundo clasificado en la Liga Adelante. 

Su entrenador Gaizka Garitano ha sido el artífice de mantener al equipo con “los pies en el suelo” e ir paso a paso, para poder llegar a conseguir un sueño, el de la Primera División.

Alex Aranzabal nos concedió una entrevista para conocer el secreto de este equipo que quiere pelearle a los grandes de España.

Indigo Fan. Presidente, una campaña para enmarcar la de este Eibar, ¿en que consiste el secreto?

Alex Aranzabal. No sabría que contestarte, por que no hay un único motivo, desde luego algo pasa cuando un equipo que compite con inferioridad de recursos económicos, de afición ‘a nivel de estadio y ciudad’, y consigue estar ahí arriba puede ser uno de esos motivos. Intentamos optimizar el vestuario, la unidad es una de las fuerzas, en la gran mayoría de equipos hay licencias que en muchos casos no nos podemos permitir. Es clave la unión, la implicación de la gente e intentar sacar lo mejor de cada uno, y de hecho se ve que jugadores que en otros equipos no han funcionado y al llegar aquí es cuando dan resultado. Eso en cuanto en el terreno de juego, fuera de él, hay un modelo que ya tiene nombre ‘El modelo Eibar’ en gestión. El club no tiene deudas, se gestiona como una empresa que intenta ser eficiente, y el éxito deportivo siempre viene precedido del orden económico.

I.F. ¿Imaginaban a estas alturas estar muy cerca de la Primera División?

A.A. Bueno, uno con su corazoncito, siempre sueña, pero vamos, lo normal es que si tu subes de Segunda B a Segunda, el objetivo es la permanencia, y con ese objetivo iniciamos la temporada, las cosas han ido saliendo bien, y estamos metidos en lo que puede ser un gran paso para subir a Primera División.

I.F. ¿Qué pasará finalmente con el estadio si se asciende?

A.A. Sin duda seguiremos jugando en Ipurúa, es lo que la gente quiere, tenemos las medidas reglamentarias, un estadio, si tenemos que hacer alguna reforma sin problemas lo haríamos pero seguiríamos jugando aquí, el equipo se debe a su ciudad y estamos orgullosos de su estadio.

I.F. Un equipo sin deudas en el mundo del futbol es difícil de ver, ¿cómo se logró esto?

A.A. Tenemos 4 o 5 bases fundamentales, una de ellas nunca vivir por encima de nuestras posibilidades, el equipo no está endeudado, nunca se pidió préstamos para hacer fichajes, tenemos muy claro debemos gestionarnos con los recursos que somos capaces de generar, la bascula siempre tiene que estar nivelada y jamás superar la línea de la peligrosidad de endeudarnos.

I.F. ¿En qué consiste la campaña salvemos al Eibar?

A.A.  Pues básicamente en lo que el slogan dice, ‘Salvar al Eibar’. En el que el equipo tiene que asumir una ampliación de capital, entendemos que por una ley injusta y mal hecha, ya que era una ley que pretendía ordenar el futbol, y en ver que un equipo ordenado como el nuestro se ve violentado a multiplicar su capital social por 5 hasta 2 millones, nosotros tenemos una situación financiera buena.

I.F. Mucha gente nos ha comentado que a ciertos “dueños” del futbol no verían con buenos ojos ver a un equipo como el Eibar en la Primera División…

A.A. A mi todo esto me parece un disparate, es más bien al contrario, el futbol y el estado, esta necesitado de gestas como estas, me parece genial que hayan unos Messis, Cristianos Ronaldos, tenemos un futbol totalmente quebrados, llenos de deudas multimillonarias y si ese es el modelo que queremos seguir, sinceramente, vivimos de otra manera y así lo vemos, frente al futbol de la burbuja y vivir por encima de las posibilidades y de quebrar los clubes y no cumplir los objetivos, nosotros representamos con más humildad otros valores que creo que son buenos para la sociedad, es injusto que no se premien a clubs como los nuestros, y se castiguen haciendo crecer su patrimonio.