En septiembre de 2020 el nombre de Gerardo Ulloa se escuchó por todo México, y no era para menos. El atleta, en ciclismo de montaña, había ganado la Copa del Mundo en República Checa, dejando en claro que él es uno de los mejores en esta disciplina en el planeta.
Después de ocho meses de ese gran éxito, y que lo colocó como el rival a vencer en México, acepta que: “es momento de creérmela”.
“Viendo mis resultados, mis tiempos, la verdad es que no estoy tan lejano a ese nivel del que me encontraba antes del parón, entonces es momento de creérmela porque voy a estar peleando con los mejores en cada evento hasta llegar a Tokio, voy a estar al tú por tú y para estar en esa posición es que yo también soy de los mejores.
“Siempre he sido muy competitivo y siempre me ha gustado ganar, a todos nos gusta ganar, pero para mí esas palabras, “creérmela”, son parte fundamental en mi carrera porque va en dos aspectos: el primero es creer en ti, porque aquí la persona que debe tener más confianza en ti eres tú, confiar en tu talento”, explica el atleta en entrevista con Reporte Índigo.
Sin embargo, el talento es sólo 50 por ciento de lo que realmente es un atleta, y Gerardo lo entiende muy bien, por lo que, en lo personal, no descuida su preparación, “pues sé que uno, dos o tres días sin entrenar, pierdes los de cuatro meses de entrenamiento, el ciclismo es muy celoso”.
“El segundo aspecto que me enseñó esa palabra de creer es que creer es parte importante de todo proceso y cuando lo vas cumpliendo tienes que ser consciente de que, si estás aquí es porque eres de los mejores, pero también aquí entra otra parte fundamental que es trabajar duro para conquistar tu sueño, porque no sólo es me la creo y ya, es saber qué estás haciendo por conseguir tu sueño, y eso es trabajar duro”, agrega.
La medalla, un sueño de Gerardo Ulloa
Faltan exactamente 50 días para que se lleve a cabo la ceremonia inaugural en Tokio 2020 y aunque todavía es lejano el día para que Gerardo compita, como todo deportista, el atleta mexicano se visualiza en su primer día en tierras niponas, pero sobre todo con una medalla Olímpica para darle un gusto extra a México.
“Yo nunca he dejado de disfrutar el deporte, es pesado, lo sé, pero me gusta lo que hago, lo amo y lo disfruto como nadie y eso me ha ayudado a no distraerme de mis objetivos, si soy el número uno en México ya es cosa aparte, pero aquí un punto clave es disfrutar todo lo que haces.
“Uno va a hacer lo mejor que pueda en Juegos Olímpicos, pero claro que me visualizo con una medalla olímpica porque sé que es posible, pero sé que primero tengo que disfrutar el evento y confío en que si lo disfruto, la medalla se dará sin problema alguno”, menciona el atleta.